Un testigo declaró el martes en un tribunal en Nueva York que presenció dos reuniones entre el presidente de Honduras y un presunto narcotraficante, Geovanny Fuentes, en las que hablaron de drogas y se entregó dinero para la campaña política de Juan Orlando Hernández.
Antilavadodedinero / Univision
«No podía creer lo que estaba viendo en ese momento», dijo el testigo, un contador hondureño.. Dijo al tribunal como escuchó al presidente Hernández decirle a Fuentes «que no habrá que preocuparse de la justicia». Añadió que Hernández le dijo a Fuentes » les vamos a meter la droga a los gringos en sus propias narices y ni cuenta se van a dar».
Lo que diga el testigo protegido podría ayudar a determinar la suerte de Fuentes, enjuiciado por tráfico de drogas y cargos relacionados con armas, así como del asediado presidente Hernández. Otro testigo clave en el juicio testificó la semana pasada que pagó sobornos por un total de 1.25 millones de dólares a políticos de alto nivel, incluido el presidente Juan Orlando Hernández
Los fiscales acusan a Hernández, que es un coconspirador no acusado, de recibir 25,000 dólares en sobornos de Fuentes durante dos reuniones en 2013, cuando el presidente se presentaba a su primer mandato. Un contable, identificado como ‘José Sánchez’ por los fiscales, presuntamente fue testigo de las reuniones y cambió el dinero en efectivo en moneda local para Hernández.
El contable de 45 años declaró que huyó de Honduras en 2015 temiendo por su vida. «Huí de mi país (…) porque fui testigo presencial en dos reuniones entre el acusado y el presidente Juan Orlando Hernández», el la cual hablaron de la protección de los cargamentos de droga, dijo al tribunal.
Hernández ha negado enérgicamente las acusaciones, diciendo que los narcotraficantes han encontrado una «llave mágica» contando mentiras a los fiscales para rebajar sus propias sentencias. Su hermano, el exlegislador Juan Antonio ‘Tony’ Hernández fue condenado por narcotráfico en octubre de 2019 y está previsto que sea sentenciado a finales de este mes, tras un largo retraso causado por la pandemia
El testigo protegido, sin embargo, no es un narcotraficante ni parece estar involucrado en ninguna actividad ilícita. Si su testimonio es convincente, podría ayudar a una condena de Fuentes y reforzar el caso contra Hernández, que ha sido nombrado en tres otros casos de tráfico de drogas.
Las reuniones en cuestión tuvieron lugar supuestamente en una fábrica de arroz propiedad del empresario Fuad Jarufe. El contable dijo que trabajó para la fábrica durante 15 años y se reunía regularmente con Fuentes entre 2003 y 2014.