Los reguladores antimonopolio de la UE multaron el viernes al grupo hotelero español Melia con 6,7 millones de euros (7,2 millones de dólares) por discriminar a los clientes en función de su país de residencia, la última sanción contra las prácticas que impiden a los clientes comprar las ofertas más bajas en el bloque.
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La multa, reducida en un 30% a cambio de que Melia admitiera haber actuado mal, siguió a una investigación de tres años en 15 compañías sospechosas de restringir las ventas en línea de productos electrónicos, videojuegos y habitaciones de hotel.
“Melia evitó que los operadores turísticos ofrecieran libremente alojamiento en hoteles en todas partes de Europa. Como resultado, los consumidores tuvieron acceso a diferentes ofertas y diferentes precios en función de su nacionalidad “, dijo la comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, en un comunicado.
La Comisión Europea también cerró los procedimientos contra cuatro operadores turísticos que tenían contratos con Melia. Cuando abrió la investigación de 2017, dijo que las compañías involucradas eran Kuoni, REWE y Thomas Cook.
