El notorio paraíso fiscal parece estar limpiando su actuación en materia de lucha contra el lavado de dinero y financiación del terrorismo antes de un examen del GAFI.
Antilavadodedinero / Cointelegraf
El Ministerio de Servicios Financieros del Gobierno de las Islas Caimán anunció que ha iniciado un marco reglamentario para los proveedores de servicios de activos virtuales, o VASP.
En un comunicado de prensa del 31 de octubre, el ministerio afirmó que la medida había fortalecido la «capacidad del país para regular y atraer a las personas y entidades que se ocupan de los activos virtuales como negocio».
La primera fase de la aplicación, que ya está en marcha, se centra en el cumplimiento y la aplicación de las normas contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo.
El nuevo marco incorpora las recomendaciones actualizadas que el Grupo de Acción Financiera Internacional aprobó en 2019.
Como informó Cointelegraph en su momento, esas recomendaciones incluían la controvertida «regla de los viajes», que exige que los proveedores de servicios de valor agregado reúnan y compartan datos personales sobre el originador y el beneficiario de las transacciones.
Los proveedores de servicios de valor agregado existentes y los recién llegados al mercado deberán inscribirse en la Autoridad Monetaria de las Islas Caimán a fin de demostrar que cumplen las normas mundiales de lucha contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo.
El régimen ALD/CFT de las Islas Caimán actualmente está siendo revisado tanto por el GAFI como por el Grupo de Acción Financiera del Caribe tras un reciente Informe de Evaluación Mutua.
El marco de VASP se someterá a consideración antes de la recalificación del GAFIC, prevista para noviembre. Se espera que los resultados de la revisión del GAFI se den a conocer a finales del primer trimestre de 2021.
La segunda fase de la implementación del marco incluirá «requisitos de licencia y supervisión prudencial», y se espera que entre en vigor en junio de 2021.
El mes pasado las Islas Caimán fueron retiradas de la lista negra de paraísos fiscales de la Unión Europea y parece que están haciendo serios esfuerzos por mejorar su imagen en los círculos financieros.