Un juez federal de Miami accedió el lunes a un pedido de los fiscales y ordenó que permanezcan sellados y sin acceso al público las pruebas y documentos que presente en su defensa el empresario colombiano Alex Saab, acusado de lavar cientos de millones de dólares obtenidos a través de negocios corruptos con el gobierno venezolano.
Antilavado de Dinero / AP News.
La decisión del juez Robert Scola tuvo lugar tres días después que la fiscalía presentó una moción solicitando una orden que regule la divulgación de pruebas e información sensible de Saab, alegando que incluyen documentos y reportes sobre otras personas que están siendo investigadas, otros acusados, testigos que están cooperando e información personal como nombres, números de identificación, direcciones postales y de correo electrónico, cuentas bancarias y fechas de nacimiento.
En su pedido, los fiscales Kurt Lunkenheimer y Alexander Kramer le dijeron al juez que habían consultado a los abogados de Saab y estaban de acuerdo.
“La moción del gobierno es concedida”, expresó el juez Scola en su orden de tres páginas, en la que explica que ni los fiscales ni la defensa de Saab deben ofrecer las pruebas solicitadas por el tribunal a ninguna persona, salvo que la corte disponga lo contrario.
En Estados Unidos tanto las audiencias como el material de un proceso judicial es público, salvo que un juez ordene lo contrario.
Los fiscales alegan que Saab, de 49 años, obtuvo más de 350 millones de dólares a través de negocios corruptos en los que habría sobornado a funcionarios del gobierno de Maduro y falsificado documentos para obtener multimillonarios contratos de construcción de viviendas económicas en Venezuela.
En julio de 2019, un jurado investigador presentó ocho acusaciones contra Saab: una por presunta conspiración para para lavar dinero y siete por lavado de dinero, pero el gobierno estadounidense retiró posteriormente los siete cargos de lavado de dinero, parte de un acuerdo para extraditarlo desde Cabo Verde, donde fue detenido en junio de 2020.
Saab llegó a Estados Unidos en octubre de 2021 y permanece en una prisión federal del centro de Miami.