Adal Ortiz Ávalos, presidente de la Confederación Patronal de la República (Coparmex) Ciudad de México, afirmó que cualquier pequeña y mediana empresa (pymes) debe adoptar una cultura sólida de prevención de lavado de dinero para integrarse exitosamente a las cadenas de valor de grandes corporaciones en en México y el extranjero.
“Tenemos que tener en mente una cultura de compliance (cumplimiento normativo), una cultura de prevención de lavado de dinero y una cultura ASG (ambiental, social y gobernanza)”, declaró durante el Seminario Nacional de Formación de Empresarios Jóvenes de Coparmex Nacional
La prevención de lavado de dinero y una cultura ambiental, social y gobernanza antes eran un requisito exclusivamente para ciertos sectores, por ejemplo, el financiero, o para empresas que buscaban capital en mercados internacionales: “Esto ya dejó de ser así, y ya es un requisito para cualquier Pyme que quiera surtirle a una gran empresa”, manifestó.
Con la visión de que “no hay cosa más rentable que hacer lo correcto”, dijo Adal Ortiz.
El empresario subrayó que “si el equipo legal y fiscal de una gran empresa, una empresa transnacional, detecta que tienes una contabilidad simulada o que tienes una compra de facturas, simplemente no entras al proceso de la cadena de valor o de suministro de estas grandes empresas”.
“Tener una estructura grande de cumplimiento de prevención de lavado de dinero no tiene que ser la gran implementación, la gran inversión simplemente es empezar a tomar conciencia y empezar a ejecutar acciones de manual en esos temas”, afirmó.
El presidente de la Coparmex CDMX habló sobre los tiempos que conlleva vender a grandes empresas, ya que “los procesos de compra en las grandes empresas son procesos que pueden tardar de 3 a 12 meses”.
Destacó que solo un 10 por ciento de las Pymes logra vender a las grandes corporaciones, aunque aquellas que lo logran “tienen en promedio tres veces más ventas que las que no lo hacen”.
En cuanto a la estrategia comercial, Ortiz Ávalos fue enfático al señalar que venderle a una gran empresa no puede ser la única estrategia de una Pyme: “Si venderte a una gran empresa es toda nuestra estrategia comercial, las probabilidades de quebrar en el corto y mediano plazo son altísimas”.
También destacó los retos financieros que enfrentan las Pymes al integrar sus productos o servicios en cadenas de valor de grandes empresas, señalando que “las grandes empresas tardan en pagar entre 30 a 120 días. Entonces, tienen que hacer sus números y ver si su negocio y su estructura pueden aguantar esos períodos largos, porque al final eso se transforma en costo financiero”.
El líder del sindicato patronal hizo un llamado a los jóvenes empresarios a adoptar una mentalidad de adaptación y aprovechamiento de oportunidades en tiempos de incertidumbre. “Los empresarios también prosperan en el caos y en medio de la incertidumbre”, afirmó.
“Si hay ciclón o tormenta y se ve que son tiempos de turbulencia, no hay que ponerse el impermeable, hay que producir impermeables, hay que producir refugios, hay que producir víveres. Eso es lo que hacen los empresarios, hacer de las oportunidades, prosperidad y riqueza”.
Adal Ortiz habló sobre los valores fundamentales en los negocios, resaltando la importancia de la empatía.
“No hay cosa más rentable que hacer lo correcto. La empatía nos va a hacer mejores personas y ser mejores personas nos va a hacer más prósperos y más ricos. Y esta plática me encanta dársela a ustedes porque al ser empresarios Coparmex, el que seamos más ricos y más prósperos, le va a hacer un bien a este país y al mundo”, expresó.
