Las autoridades estadounidenses plantearon cargos el lunes e impusieron sanciones financieras y restricciones de visa contra ciudadanos estadounidenses y ugandeses por su presunta participación en un plan corrupto de adopción de niños.
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Los jueces ugandeses Moses Mukiibi y Wilson Musalu Musene, y la abogada ugandesa Dorah Mirembe y su asociado Patrick Ecobu, fueron sancionados por participar en una estafa en la que “el bufete de abogados de Mirembe utilizó los servicios de terceros para buscar familias vulnerables en aldeas remotas de Uganda, prometiendo padres que sus hijos serían trasladados a Kampala para continuar su educación ”, dijo el Departamento de Estado .
En cambio, los niños terminarían con «futuros padres adoptivos estadounidenses» que desconocen el plan, que viajarían a Uganda para adoptarlos de un hogar infantil sin licencia en Kampala.
Mirembe, con la ayuda de Ecobu, según las autoridades estadounidenses, «facilitó sobornos a jueces ugandeses y otros funcionarios del gobierno ugandés para procurar casos de adopción de manera fraudulenta, ya sea directamente o mediante un interlocutor».
Supuestamente estaba pagando sobornos para que los casos fueran dirigidos a los jueces Mukiibi y Musene.
Mukiibi y Musene «son funcionarios gubernamentales actuales o anteriores, o personas que actúan en nombre de dicho funcionario, que son responsables o cómplices o que han participado directa o indirectamente en actos de corrupción, incluida la apropiación indebida de activos estatales, la expropiación de activos privados para beneficio personal, corrupción relacionada con contratos gubernamentales o la extracción de recursos naturales, o soborno ”, según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos .
“Las personas involucradas en esta estafa corrupta explotaron deliberadamente la buena fe de los ugandeses y estadounidenses para enriquecerse”, dijo Justin G. Muzinich, subsecretario del Tesoro.
Añadió que «engañar a familias ugandesas inocentes para que entreguen a sus hijos en adopción ha causado un gran sufrimiento».
El Departamento de Justicia de Estados Unidos amplió la lista de víctimas y sospechosos y, aparte de Mirembe, también presentó cargos contra Margaret Cole, de 73 años, de Strongsville, Ohio, y Debra Parris, de 68, de Lake Dallas, Texas.
Los tres están acusados »por su presunta participación en planes para conseguir adopciones de niños ugandeses, pero también polacos, de forma corrupta y fraudulenta, mediante el soborno a funcionarios ugandeses y defraudando a los padres adoptivos estadounidenses, las autoridades estadounidenses y una autoridad reguladora polaca».
Parris y Mirembe fueron acusados de conspiración para violar la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA) y cometer fraude de visas, fraude postal y fraude electrónico, así como lavado de dinero, se lee en el comunicado.
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En relación con el plan de Polonia, agregó, Parris y Cole fueron acusados de conspiración para defraudar a los Estados Unidos, mientras que Cole fue acusado además de hacer declaraciones falsas a las autoridades estadounidenses y polacas.
El fiscal federal Justin Herdman del Distrito Norte de Ohio enfatizó que el resultado de esta supuesta conducta es que «los posibles padres fueron engañados, cientos de miles de dólares fueron mal utilizados y niños inocentes fueron desplazados de sus hogares».