El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) llegó a un acuerdo con siete bancos para que estas instituciones respondan por los fraudes que afecten a sus clientes, esto en le marco de mediaciones colectivas que comenzaron hace casi dos años, en marzo de 2017.
La idea es que la banca elimine de los contratos de sus clientes una serie de cláusulas relativas a eventuales fraudes, pues según el Sernac, los bancos buscaban eximirse anticipadamente de sus responsabilidades en engaños como el phishing o el pharming, entre otros.
Para el director del Sernac, Lucas del Villar, esta es “una buena noticia para las consumidores del punto de vista que hay siete bancos que están ajustando su contrato de adhesión y adicionalmente se están comprometiendo a un cambio cultural de respuesta en relación a la mala utilización que pueden hacer terceros, que son delincuentes, sobre las tarjetas de crédito, de débito y principalmente las defraudaciones”.
Según Del Villar, el Sernac tendrá con la nueva ley facultades para estar más vigilante del cumplimiento de este acuerdo, así como también de la ley 20.009, que justamente establece responsabilidad de los emisores de tarjetas una vez que el cliente alerte sobre estos delitos.
Las entidades con las que el Sernac acordó esta medida son Consorcio, Banco Internacional, BICE, Santander, Banco Falabella, Security, BCI y Scotiabank.
El Banco Santander fue el único entre los ocho bancos que ingresaron en esta mediación colectiva que no pactó con el organismo de defensa a los consumidores y adelantó acciones que informará oportunamente.
De hecho, hace una semana la Corte de Apelaciones de Santiago acogió un recurso de protección y ordenó al Banco Santander restituir los fondos descontados a una clienta que fue víctima de uso fraudulento de su tarjeta de crédito en Italia.