Un documento en manos del Senado estadounidense indica que una de las empresas de Hunter Biden utilizó la «fuerte» relación entre Joe Biden y el expresidente colombiano Juan Manuel Santos para convencer a una empresa china de invertir en Colombia. La empresa de los Biden proponía hacer negocios en campos petroleros y un oleoducto desde Venezuela.
Antilavadodedinero / Sputnik
El nombre de Hunter Biden no ha dejado de ser una piedra en el zapato para la carrera hacia la Casa Blanca de su padre, Joe Biden, durante los meses previos a las elecciones generales de EEUU que se realizan este 3 de noviembre. Ahora, nuevos documentos indican que Hunter Biden utilizó el nombre del padre a su favor para concretar negocios en Colombia y atraer capitales chinos.
Biden apunta a Rusia para defenderse de las acusaciones de corrupciónUna fotografía del actual candidato demócrata estrechando la mano del expresidente colombiano Juan Manuel Santos no debería sorprender.
En efecto, Joe Biden visitó Colombia en diciembre de 2016, cuando todavía era vicepresidente de Barack Obama (2009-2017), para reunirse con Santos, en ese entonces mandatario colombiano, y respaldar el proceso de paz que impulsaba en el país sudamericano.
Lo llamativo es que la fotografía de ambos aparezca resaltada en un documento ideado para atraer inversores. O al menos así lo entiende la comisión del Senado estadounidense que investiga si el hijo de Joe Biden se benefició de su padre para hacer negocios en el exterior.
Según un artículo del portal estadounidense Daily Caller, recogido por la revista colombiana Semana, el comité del Senado de EEUU tiene en su poder documentos que muestran cómo Hunter Biden intentó utilizar en su favor el apellido paterno para concretar negocios con la empresa china CEFC China Energy y realizar inversiones en Omán, Rumania, Luxemburgo y Colombia.
Biden y Colombia, la «puerta de entrada a América Latina»
Uno de los documentos analizados es un dossier de 2017 en el que se busca convencer al conglomerado chino de invertir 10 millones de dólares en un emprendimiento petrolero en Colombia, país al que calificaban como la «puerta de entrada a América Latina».
La sección del documento dedicada a los negocios en Colombia incluye la fotografía de Santos y Joe Biden estrechando sus manos y añade: «La relación entre el presidente colombiano Juan Manuel Santos y Joe Biden ha sido fuerte durante la Administración Obama».
También se destaca que Joe Biden «prometió su firme apoyo personal al proceso de paz» liderado por Santos y abogó por «la importancia de mantener el apoyo bipartidista para Colombia en el Congreso de los Estados Unidos».
El documento es redactado por EEIG, una empresa asociada a SinoHawk — un consorcio atribuido a la familia Biden— y ofrece a la empresa china un «marco para la asociación» con empresas locales colombianas «con una sólida base que comienza desde los fundamentos mismos de la administración del país».
Entre los negocios en Colombia que EEIG ofrece a la CEFC están un pozo petrolero actualmente manejado por una empresa Rattan Holdings, una inversión en el Puerto de Buenaventura sobre el océano Pacífico y un oleoducto que transporte petróleo desde Venezuela.
El periódico Semana pone énfasis en la alusión explícita que el documento hace de una posible asociación con la familia Santo Domingo. En ese sentido, destaca que «durante décadas, la familia Santo Domingo ha controlado una red de empresas» y remarca que EEIG ya ha «sentado las bases en el país con la familia Santo Domingo como posibles socios locales».
A pesar de la oferta, CEFC finalmente no concretó la inversión de 10 millones de dólares solicitada por EEIG. Sin embargo, documentos entregados al comité del Senado por el empresario Tony Bobulinski —exsocio de Hunter Biden y James Biden (tío de Hunter y hermano de Joe)— indican que la empresa china hizo un pago de 5 millones de dólares al estudio de abogados de Hunter Biden entre agosto de 2017 y agosto de 2018.
La declaración de Bobulinski ante el Senado se convirtió en otro problema para Joe Biden, ya que el empresario aseguró que el candidato demócrata a la Presidencia de EEUU no solo estaba al tanto de los negocios con la empresa china sino que llegó a participar de reuniones sobre el tema.
Esa participación es fuertemente negada por el comando de campaña de Biden, quien sostiene que no está vinculado a los negocios de su familia.