Un mexicano fue sentenciado hoy en el Distrito de Columbia a 13 años de prisión por conspirar para distribuir cocaína para su importación a los Estados Unidos.
Según documentos judiciales, entre 1998 y aproximadamente 2012, Jaime Antonio Mandujano-Eudave, de 61 años, trabajó con el Cártel de Sinaloa para coordinar el transporte de cocaína por barco desde Colombia a Culiacán, Los Cabos y otros lugares de México. Mandujano-Eudave comunicó las coordenadas GPS a los tripulantes de los barcos para facilitar las reuniones en el Océano Pacífico.
Allí, los barcos cargados de cocaína desde Colombia se encontrarían con otros barcos bajo el control del Cartel de Sinaloa y descargarían la cocaína. Estos barcos transportaban cantidades de varios kilogramos de cocaína.
Una vez que la cocaína llegaba a México, otros miembros del Cártel de Sinaloa transportaban la cocaína a Estados Unidos para su venta. Mandujano-Eudave sabía que la cocaína sería posteriormente importada a los Estados Unidos para su posterior distribución.
En 2009, Mandujano-Eudave envió una embarcación, la Fiona, para recoger aproximadamente 1.000 kilogramos de cocaína en el Océano Pacífico. En octubre de 2009, la Guardia Costera de los EE. UU. interceptó al Fiona justo al norte de la isla Clarion, México. El Fiona fue incendiado por su tripulación, pero la Guardia Costera de los EE. UU. pudo recuperar 500 kilogramos de cocaína del agua.
En agosto de 2014, las autoridades españolas arrestaron a Mandujano-Eudave a pedido de Estados Unidos. Fue extraditado de España a Estados Unidos en febrero de 2015. El 8 de marzo, Mandujano-Eudave se declaró culpable de un cargo de conspiración para distribuir cinco kilogramos o más de cocaína, sabiendo y con la intención de importarla a Estados Unidos.
El fiscal general adjunto Kenneth A. Polite, Jr. de la División Criminal del Departamento de Justicia y el agente especial a cargo Ivan J. Arvelo de la oficina de campo de Nueva York de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés) hicieron el anuncio.
La oficina local de HSI en Nueva York investigó el caso con la asistencia de la oficina local del FBI en Washington.
Los abogados litigantes Kirk Handrich y Melanie Alsworth de la Sección de Narcóticos y Drogas Peligrosas de la División Criminal estuvieron a cargo de la acusación en el caso. La Oficina de Operaciones de Cumplimiento de la División Criminal brindó una asistencia significativa.
La Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia trabajó con socios encargados de hacer cumplir la ley en España para asegurar el arresto y la extradición de Mandujano-Eudave.
Este caso cuenta con el apoyo de las Fuerzas Especiales de Control de Drogas contra el Crimen Organizado (OCDETF).
