El juez federal de distrito James K. Bredar condenó a dos miembros de la pandilla MS-13, José Alberto Sibrian García y Carlos Hernández Díaz, a una prisión federal, seguidos de cinco años de libertad supervisada, bajo un cargo federal de crimen organizado relacionado con su participación en una conspiración violenta de crimen organizado, específicamente MS-13, incluidos asesinatos.
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Las sentencias fueron anunciadas por el Fiscal de los Estados Unidos para el Distrito de Maryland Robert K. Hur; Agente Especial a Cargo Jennifer C. Boone de la Oficina Federal de Investigación, Oficina de Campo de Baltimore; Agente Especial a Cargo John Eisert de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) de Baltimore; Jefe Edward G. Hargis del Departamento de Policía de Frederick; El fiscal del estado del condado de Frederick J. Charles Smith, III; Jefe Timothy J. Altomare del Departamento de Policía del Condado de Anne Arundel; Anne Colt Leitess, Fiscal del Estado del Condado de Anne Arundel;Jefe Henry P. Stawinski III del Departamento de Policía del Condado de Prince George; La abogada del estado del condado de Prince George, Aisha Braveboy; Jefe Marcus Jones del Departamento de Policía del Condado de Montgomery; y el abogado del estado del condado de Montgomery, John McCarthy.
“Los miembros de la MS-13 están cometiendo horribles actos de violencia en Maryland. No debemos permitir que estos delincuentes asolen nuestras comunidades, propagando el miedo a su paso «, dijo el fiscal federal Robert K. Hur. “La policía federal, estatal y local utilizará todas las herramientas a nuestra disposición para arrestar y enjuiciar a los miembros de pandillas que se aprovechan de nuestros vecinos.No descansaremos hasta que desmantelemos esta organización para hacer que Maryland sea más seguro ”.
“La oración de hoy elimina una pequeña parte de la plaga que se ha extendido por nuestras comunidades.Y si bien significa que estos acusados estarán fuera de las calles durante décadas, nuestro trabajo no está terminado ”, dijo Jennifer Boone, Agente Especial a Cargo de la Oficina de Campo de Baltimore del FBI.»Juntos, trabajando con nuestros socios cívicos y comunitarios, la comunidad de aplicación de la ley será implacable en nuestra búsqueda de estos pandilleros hasta que nuestras calles estén a salvo del flagelo de la MS-13″.
«La MS-13 perpetúa la violencia sin sentido en nuestras comunidades», dijo el agente especial de HSI Baltimore a cargo, John Eisert. «A través de la coordinación con nuestros socios locales y federales, en el país y en el extranjero, continuaremos en nuestra misión de deshabilitar y desmantelar la MS-13».
MS-13 es una pandilla nacional e internacional compuesta principalmente por inmigrantes o descendientes de El Salvador y otros países centroamericanos. Las sucursales o «camarillas» de MS-13, una de las pandillas callejeras más grandes de los Estados Unidos, operan en todo el condado de Frederick, el condado de Anne Arundel, el condado de Prince George y el condado de Montgomery, Maryland. Desde 2016 y 2017, respectivamente, Sibrian García y Hernández Díaz fueron miembros y asociados de la camarilla Fulton Locotes Salvatrucha de MS-13.
En todo momento de esta conspiración, se esperaba que los miembros de MS-13 protegieran el nombre, la reputación y el estado de la pandilla de los pandilleros rivales y otras personas. Para proteger a la pandilla y mejorar su reputación, se esperaba que los miembros de la MS-13 usaran cualquier medio necesario para forzar el respeto de quienes mostraban falta de respeto, incluidos actos de intimidación y violencia.MS-13 tenía lemas consistentes con sus reglas, creencias, expectativas y reputación, incluyendo «mata, viola, controla», que se traduce como «matar, violar, controlar» y «ver, oir y callar», que significa «ver nada, no escuches nada y no digas nada «.
Los miembros de la MS-13 deben cometer actos de violencia tanto para mantener la membresía y la disciplina dentro de la pandilla, como contra los miembros rivales de la pandilla. La participación en actividades delictivas de un miembro, particularmente en actos violentos dirigidos a pandillas rivales o según lo dirigido por el liderazgo de la pandilla, aumenta el respeto otorgado a ese miembro, lo que resulta en que ese miembro mantenga o aumente su posición en la pandilla, y abre la puerta a un ascenso a una posición de liderazgo.
Una de las principales reglas de MS-13 es que sus miembros deben atacar y matar rivales, a menudo denominados «chavalas», siempre que sea posible.
Según sus acuerdos de declaración de culpabilidad, Sibrian García y Hernández Díaz conspiraron con otros miembros y asociados de la MS-13 para participar en actividades de crimen organizado, incluidos asesinatos, conspiraciones para cometer asesinatos, intentos de asesinato, extorsión, robo y tráfico de drogas, a fin de promover los intereses. de la pandilla.
Intento de asesinato en Wheaton Específicamente, en julio de 2016, otro miembro de la pandilla MS-13 identificó a la Víctima 9 como un presunto miembro rival de la pandilla y ordenó a Sibrian García y otros miembros de la MS-13 que hicieran arreglos para atraer a la Víctima 9 a un área apartada en Wheaton Park para que Sin embargo, para asesinarlo, la Víctima 9 se negó a ir al área aislada. Después de eso, otro miembro de la MS-13 encontró a la Víctima 9 en la calle y le disparó. La víctima 9 sobrevivió.
Asesinato en Wheaton Sibrian García también admitió que en marzo de 2017, él y otros miembros de la pandilla MS-13 llevaron a la Víctima 13 de Annapolis al Parque Regional Wheaton en Wheaton, Maryland, donde otros miembros de la pandilla MS-13 habían cavado una tumba y reunieron armas.
Cuando llegó la víctima 13, Sibrian García y otros miembros de la pandilla MS-13 lo atacaron con un machete y cuchillos, matándolo. El cuerpo de la víctima 13 fue desmembrado y enterrado en la tumba. En septiembre de 2017, los investigadores recuperaron el cuerpo de la víctima 13 de la tumba en Wheaton.Como se detalla en el acuerdo de culpabilidad, el médico forense encontró que la causa de la muerte fue el homicidio. El cuerpo había sufrido numerosos traumas de fuerza contundente y aguda, la cabeza de la víctima había sido cortada y su corazón había sido extirpado.
Asesinato en Frederick Como se detalla en el acuerdo de culpabilidad de Hernández Díaz, en abril de 2017, los miembros de la pandilla MS-13 encontraron a la Víctima 14 en Silver Spring, Maryland, y llamaron a Hernández Díaz y otros para confirmar que la Víctima 14 era un miembro de la pandilla rival.
Después de recibir la confirmación de que la Víctima 14 era un miembro de una pandilla rival, hicieron arreglos con otros miembros de la pandilla para identificar un lugar en Frederick, Maryland, donde la víctima podría ser asesinada y contactaron a otros miembros de la pandilla para organizar el transporte de la Víctima 14 a Frederick.
La víctima 14 fue transportada por miembros de la MS-13 a la cuenca de la ciudad de Frederick fuera de Gambrill Park Road en Frederick, donde habían cavado una tumba y reunieron armas. Cuando llegó la Víctima 14, algunos pandilleros lo golpearon con una rama de árbol y luego Hernández Díaz y otros pandilleros lo atacaron con un machete y cuchillos hasta que murió. El cuerpo de la víctima 14 fue desmembrado y enterrado en la tumba. Los restos de la víctima 14 fueron encontrados en junio de 2017.
Asaltos en Wheaton Según su acuerdo de declaración de culpabilidad, el 14 de junio de 2017, Sibrian García y otros miembros de la pandilla MS-13 estaban en el Parque Regional Wheaton en Wheaton, Maryland, cuando vieron a la Víctima 15 y la Víctima 16, quienes sospechaban que eran miembros de pandillas rivales. Sibrian Garcia y otros pandilleros encontraron a las víctimas 15 y 16 en un baño y las obligaron a salir a punta de cuchillo. Sibrian Garcia y los otros pandilleros golpearon a las víctimas 15 y 16 con ramas, puños y pies y hablaron de matarlos con el cuchillo. Cuando los espectadores se acercaron, Sibrian Garcia y los otros miembros de la pandilla huyeron. Los teléfonos celulares de las víctimas fueron robados. Ambas víctimas fueron transportadas al hospital por sus heridas.
Los acusados admitieron que los asesinatos, intentos de asesinato y asalto de estas víctimas tenían la intención de mantener y aumentar el estado de MS-13 y permitir a los miembros mantener o aumentar su estado dentro de la pandilla.
Distribución de drogas Finalmente, como se indica en sus acuerdos de declaración de culpabilidad, los miembros de la camarilla de Fulton, incluidos Sibrian García y Hernández Díaz, también conspiraron para distribuir marihuana. Como parte de esa conspiración, los pandilleros obtendrían grandes cantidades de marihuana y luego la dividirían para distribuirla. Al menos una parte de los ingresos de la venta de drogas iría a la pandilla para promover sus objetivos. Era razonablemente previsible para Sibrian Garcia y Hernandez Diaz que la conspiración distribuiría al menos cinco kilogramos de marihuana.
Un total de 29 acusados han sido acusados en este caso de participar en una conspiración de crimen organizado y / u otros delitos relacionados con su asociación con MS-13, incluidos 18 acusados acusados en la quinta acusación de reemplazo presentada el 21 de octubre de 2019. Un total de 13 acusados se declararon culpables de delitos relacionados con su participación en actividades de pandillas MS-13.
Se alienta a cualquier persona con información sobre MS-13 a que brinde sus consejos a las fuerzas del orden. Tanto el FBI como las Investigaciones de Seguridad Nacional tienen disciplinas a nivel nacional a las que puede llamar para informar lo que sabe. Puede comunicarse con el FBI al 1-866-STP-MS13 (1-866-787-6713), o puede llamar a HSI al 1-866-DHS-2-ICE.
El fiscal de los Estados Unidos Robert K. Hur elogió al FBI; HSI; el departamento de policía de Frederick;los departamentos de policía del condado de Anne Arundel, Montgomery y Prince George’s; y los Abogados del Estado de Anne Arundel, Frederick, Montgomery y Prince George’s County por su trabajo en la investigación, y reconocieron al Departamento de Policía del Condado de Baltimore por su ayuda. El Sr. Hur agradeció a los fiscales federales adjuntos Kenneth S. Clark, Catherine K. Dick y Matthew DellaBetta, quienes están procesando este caso de la Fuerza de Tarea contra el Crimen Organizado.
