Nicolás Sarkozy podría salir libre del escándalo con fondos ilícitos

Un fiscal en Francia indicó que no cree que haya evidencia suficiente para presentar un caso contra el expresidente Nicolas Sarkozy, por supuesto recibo de donaciones ilegales para su campaña hace seis años.Los medios franceses citaron al fiscal argumentando que el caso es débil y no debe presentarse.El mes pasado un juez de investigación ordenó investigar formalmente al expresidente, el último paso antes de que puedan presentarse formalmente las acusaciones.Aunque la decisión sobre si deben presentarse los cargos descansa en el juez, cuando un fiscal no está de acuerdo con el caso todo el proceso puede socavarse.El ex presidente francés, Nicolas Sarkozy, comparece ante un juez en Burdeos, para responder a preguntas sobre sus conexiones con la mujer más rica de Francia, la heredera de L’Oreal, Liliane Bettencourt.Investigación judicial contra Sarkozy genera revuelo en FranciaPublicado el 22/03/2013Gran revuelo genera hoy en Francia la decisión de un tribunal de poner bajo investigación judicial al ex presidente Nicolás Sarkozy, por la presunta recepción ilegal de fondos de la millonaria Liliane Bettencourt para su campaña electoral.Según las denuncias, durante la contienda de 2007 el ex jefe de Estado recibió cuantiosas sumas de Bettencourt, la mujer más rica del país y heredera del emporio LÖOreal.La víspera el juez Jean-Michel Gentil puso al antiguo mandatario en investigación judicial, un paso previo a su declaración como acusado.Para Jean-Luc Mélenchon, copresidente del Partido de Izquierda, las imputaciones contra Sarkozy tienen una enorme gravedad desde el punto de vista moral.Según el también ex candidato presidencial, la raíz del problema está en un sistema donde el dinero se impone por encima de todos los demás valores.

Europa Ecología y Los Verdes, considera que este escándalo debería ser aprovechado para modificar el estatuto legal del presidente de la República y eliminar la inmunidad judicial durante el ejercicio de su cargo.

Aunque las investigaciones del caso comenzaron durante el mandato de Sarkozy (2007-2012), la inmunidad presidencial de que disfrutaba entonces impidió su llamado a declarar.

El tema es abordado por analistas y miembros de la clase política del país, mientras los principales diarios le dedican sus primeras planas este viernes.

Laurence de Charette, analista del conservador diario Le Figaro, destaca «la tenacidad incansable del juez Gentil» para llevar adelante las investigaciones de un caso complicado.

Por su parte, Jean-Claude Souléry, de «La Dépêche du Midi» señala que la investigación judicial al ex jefe de Estado es un acontecimiento cuyas consecuencias aún no se pueden percibir por completo.

Varios dirigentes de la Unión por un Movimiento Popular, el partido al que pertenece el ex mandatario, denunciaron una revancha contra Sarkozy justo cuando se rumoraba con insistencia su retorno a la vida política y su eventual candidatura presidencial en 2017.

Si se prueba el delito de abuso de confianza y estafa, el ex inquilino del Palacio del Elíseo puede ser condenado a tres años de prisión y cinco de inhabilitación para ejercer cargos públicos, además de una cuantiosa multa.El ex presidente fue convocado este jueves 22 de noviembre de 2012, por el juez de instrucción de Burdeos (suroeste) a cargo del ‘caso Bettencourt’, en el marco del cargo de abuso de debilidad en perjuicio de la multimillonaria Liliane Bettencourt.
Sin la inmunidad presidencial, el ex jefe de Estado francés Nicolas Sarkozy está declarando ante la Justicia francesa por un supuesto financiamiento ilegal de su campaña política en el 2007, con los fondos del millonario matrimonio Bettencourt, herederos de la empresa L’Oreal y cuarta fortuna de Francia.
Al menos Sarkozy habría recibido 150.000 euros en efectivo, que la heredera ordenó entregar a Eric Woerth, el ministro y tesorero de su gobierno, en enero del 2007. Pero la familia Bettencourt haría repatriado de Suiza entre 2007 y 2009 cuatro millones de euros, que habrían terminado en las arcas de la campaña y el ex presidente, según supone la Justicia.

En el tribunal de Bordeaux, donde fue trasladada la causa para frenar las interferencias del poder presidencial de entonces, el juez Jean Michel Gentil encontró otro ángulo divergente para investigar a Sarkozy. Lo ha convocado en el dossier de «abuso de debilidad» de Liliane Bettencourt, una anciana de 90 anos que, para el magistrado, perdió el control de su mente en 2006. La sospecha del juez es que Sarkozy podría haberse aprovechado de su senilidad para obtener fondos ilícitos para la campaña y aún después, cuando ya era presidente en el palacio del Eliseo.
El juez ordenó el allanamiento de la casa de Sarkozy y su mujer, Carla Bruni en julio pasado, cuando ellos estaban de vacaciones en Canadá. Allí encontró agendas y documentos que muestran que Sarkozy mantuvo más encuentros que los declarados con Madame Bettencourt, incluido uno en el palacio del Eliseo, con los representantes de la familia Bettencourt y con el procurador de Nanterre, Philippe Courroye, que controlaba la causa hasta que fue trasladada a Bordeaux. La otra cuestión es si Sarkozy abusó de su poder presidencial para tratar de frenar las investigaciones judiciales en el affaire en los tribunales de Nanterre.La agenda presidencial está protegida por el secreto y la inmunidad. Pero el magistrado en Bordeaux consiguió armar un rompecabezas de audiencias no declaradas, antes de que el abogado de Sarkozy plantee la protección del secreto y la inmunidad en ese período.

La audiencia en el palacio del Eliseo entre Sarkozy y Madame Bettencourt en noviembre de 2008, fue una semana antes de que el presidente se encontrara con el administrador de fortuna de los Bettencourt, de Maistre, que fue a Suiza a retirar con discreción 2 millones de euros.
Las sospechas del magistrado es que hay al menos 4 millones de euros en juego de estas donaciones a Sarkozy. Testimonios del chofer de Bettencourt, de su mayordomo y del fotógrafo Françcois Bannier, un amigo de la millonaria que también abusó de su senilidad, lo denuncian.
El ex presidente declara como testigo asistido, con la presencia de su letrado Thierry Herzoy, pero puede terminar como imputado o procesado eventualmente.
Sarkozy aterrizó en Bordeaux en un avión privado y llegó a los modernos tribunales en una Renault Espane negra , con los vidrios oscuros y tratando de evitar a los periodistas, que no pudieron ingresar a los pasillos del edificio. 
Madame Bettencourt ha sido puesta bajo tutela judicial por su senilidad después de un doloroso enfrentamiento con su hija, que lo exigió a la Justicia. Su nieto Víctor se ocupa ahora de su fortuna.
SONDEOS ENCARGADOS POR LA PRESIDENCIA

Joreme Karsenti, director de Anticor
Recientemente se abrió en París una investigación preliminar a raíz de la demanda presentada por la asociación de lucha contra la corrupción Anticor sobre las condiciones de los sondeos encargados por el palacio presidencial del Elíseo entre 2007 y 2012. La demanda apunta indirectamente a Sarkozy y a sus colaboradores.
Se trata de la segunda demanda judicial de Anticor. La primera fue presentada por favoritismo en 2010, pero la instrucción de un juez de París fue bloqueada por el tribunal de apelaciones en razón de la inmunidad del jefe de Estado. El tribunal de apelación examina el miércoles un recurso de Anticor, que alega que ese estatuto de inmunidad sólo era válido mientras Sarkozy ocupaba la jefatura del Estado.
La segunda demanda, que motivó la investigación preliminar, amplía el campo de las infracciones invocadas en la primera, incorporando en particular el cargo de malversación de fondos públicos.

La asociación denuncia varios contratos, especialmente el firmado en 2007 entre el Elíseo y la firma Publifact de Patrick Buisson, exconsejero de Sarkozy.
KARACHI
En el ‘caso Karachi’, los jueces investigan un eventual financiamiento oculto de la campaña presidencial del exprimer ministro Edouard Balladur en 1995 a través de presuntas retrocomisiones de contratos de venta de armamento.
En 1995, Sarkozy era ministro de Presupuesto y portavoz de campaña de Balladur.
LIBIA
La financiación de la campaña de Sarkozy en 2007 es objeto de otra controversia, relativa a eventuales fondos de origen libio. Sarkozy presentó una demanda judicial por «falsificación» y «publicación de noticias falsas» contra el portal de información Mediapart, que había evocado un «acuerdo de principio» alcanzado en 2006 con el gobierno libio para entregar 50 millones de euros para la campaña de Sarkozy. Mediapart, por su parte, respondió presentando a su vez una demanda por denuncia calumniosa, pero sobre el fondo del caso no se ha abierto ninguna investigación judicial.
ANP/AFP

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