Un Tribunal de Panamá volvió a reprogramar este miércoles el juicio contra el expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014) por el caso de las escuchas ilegales, para el próximo 21 de julio, después de que la defensa del exmandatario presentara una nota de incapacidad médica.
Antilavadodedinero / swissinfo
«Solicitudes del Ministerio Público en audiencia de comunicación de resultado médico forense a un expresidente de la República, en caso Pinchazos, no fueron admitidas por el Tribunal de Juicio Oral. Se reprogramó juicio para el 21 de julio de 2021», informó la Fiscalía en su cuenta de Twitter.
El pasado 22 de junio, Ricardo Martinelli, de 69 años, debía afrontar un nuevo juicio por el caso conocido como «Pinchazos», pero ni él ni su defensa se personaron alegando una incapacidad médica del exmandatario por una cirugía de columna a la que se sometió dos días antes de la fecha del juicio.
A razón de ello, el Tribunal solicitó verificar dichas incapacidades presentadas por la defensa de Martinelli y reprogramó la cita para el próximo lunes -5 de julio-, un juicio para el que el Órgano Judicial ya había designado al expresidente dos abogados de oficio.
Por tanto, el juicio por el caso «Pinchazos» se ha pospuesto dos veces por incapacidades médicas el exmandatario.
Así, este miércoles se celebró una audiencia para comunicar el resultado del informe médico del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Panamá, el cual dictaminó que la cirugía fue «electiva».
La Fiscalía (Ministerio Público) pidió este miércoles durante la audiencia al Tribunal de Juicio Oral declarar en rebeldía al exmandatario, dar vigilancia y suspender la prescripción de acción penal mientras Martinelli se recupera, solicitudes que fueron rechazadas.
Martinelli y su defensa han intentado en varias ocasiones «dilatar» el proceso judicial de este caso, presentando varios recursos para alegar la supuesta prescripción del delito, pero todas se han visto frustradas.
También, un tribunal rechazó por «improcedente» una «advertencia de nulidad» de la defensa para intentar cambiar las juezas.
Este nuevo juicio fue ordenado en noviembre de 2020 por un tribunal de Apelaciones después de que Martinelli fue declarado en agosto de 2019 «no culpable» de cuatro delitos, incluida malversación, por los que se enfrentaba a 21 años de cárcel.
Ahora el expresidente debe afrontar un proceso por dos delitos: interceptación de telecomunicaciones y seguimiento, persecución y vigilancia sin autorización judicial, lo que lo expone a una pena de hasta 8 años de cárcel.
Martinelli, quien siempre ha dicho ser inocente, ordenó interceptar las telecomunicaciones de más de un centenar de personas, entre ellas, empresarios, políticos rivales e incluso aliados suyos y periodistas, de acuerdo con la acusación.
En Panamá, además de este caso, Martinelli está imputado y tiene prohibido la salida del país por el delito de lavado de dinero en otros dos procesos, el de Odebrecht y el conocido como «New Business», vinculado a la compra de un conglomerado de medios.
En España, la Audiencia Nacional ordenó este año investigar a Martinelli por presuntos delitos de corrupción en transacciones internacionales y blanqueo de dinero producido, al menos parcialmente en España, en una causa que involucra a la constructora FCC y en la que el expresidente ostentará la condición de investigado, es decir imputado.
Dos hijos del ex presidente panameño, Ricardo Alberto y Luis Enrique Martinelli Linares, están detenidos desde hace casi un año en Guatemala a petición de EE.UU., que los pide en extradición por el caso Odebrecht.