ONU: La droga de Marruecos es fuente de financiación para terroristas. El Sahel ha estado desestabilizado durante varios años por las facciones terroristas que han adoptado principalmente el tráfico del cannabis marroquí y la cocaína colombiana como su principal fuente de financiamiento para sus operaciones.
Según el informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) recogidos en el World Drug Report 2020, afirma que los traficantes de estupefacientes pagan a los grupos terroristas vinculados a Al Qaeda (AQMI) y al Estado Islámico (ISGS) para proteger los envíos que cruzan el Sahel y luego a África subsahariana y Egipto.
La importantísima producción de droga en Marruecos unida a las evidencias crecientes de la relación entre el mundo de los traficantes de drogas y el terrorismo, hacen necesario detenerse en el estudio de interés en gran medida prospectivo, de una relación fructífera entre delincuentes y de una progresiva convergencia entre ambos.
En relación a este asunto, los yihadistas y su conexión con el tráfico de drogas procedente de Marruecos, conviene recordar operaciones en los últimos meses de vínculos de terroristas con los traficantes de cannabis que cruzan el Sáhara y el Sahel.
De tal variedad de actores y de escenarios nos detendremos precisamente en el último de ellos, el ejército saharaui anunció la incautación en los territorios liberados del Sáhara Occidental de 7 toneladas en dos vehículos de matrícula marroquí con dirección a un país africanos, sin precisar.
En el país norteafricano la producción de cannabis va en aumento y la Oficina contra las Drogas y Crimen de la ONU (UNODC) afirma que la producción se ha incrementado respecto a años anteriores permitiéndole alcanzar ya el 60% de la producción mundial frente al 30% producido en 2017.
Marruecos produce cerca de 40 mil toneladas de cannabis al año en una superficie de cultivo de 52.000 hectáreas, cifras que mantienen al país como principal productor y abastecedor de esta planta alucinógena, según el Informe de la UNDOC.
La Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (Onudd), autora del documento, indica que Marruecos está muy por delante del siguiente país en la lista, Afganistán, que produce al año 1.400 toneladas, sobre una superficie de cultivo de 10.000 hectáreas. La producción y la comercialización del hachís marroquí es ya de tal envergadura y se ha comenzado a combatir tan tarde.
El valle del Rif marroquí, una de las más inestables hoy del país por «Las Revueltas del Rif», es uno de los principales polos de producción de cannabis en el país si bien estos cultivos se extienden ya por gran parte del territorio (93.000 cultivos).
La utilización de la droga marroquí por los grupos y células terroristas de Malí
Hoy es evidente para todos que los combatientes de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), Estados Islámico (ISGS) y otras facciones terroristas, se benefician del tráfico de droga a gran escala desde Marruecos, y que cada vez con más frecuencia incorporan a sus células y grupos a delincuentes de todo tipo aprovechando de paso sus redes clandestinas.
La creciente penetración del cannabis marroquí en la región del África Occidental en general y del Magreb en particular para desde ahí saltar a Europa y a África subsahariana, está además haciendo temer a fuerzas de seguridad de varios países que dicho tráfico, hasta tiempos recientes ajeno a la zona, penetre las redes que ya traficaban con otras drogas o con seres humanos (inmigrantes) así como las células terroristas.
De una droga a otra
Se nos recuerda que Marruecos es el mayor productor mundial de resina de cannabis. El cannabis se ha convertido en una verdadera industria. A pesar de su prohibición, representa la principal fuente de ingresos para 90 a 140,000 familias. El precio promedio de un kilogramo de cannabis crudo se estima en 8 dólares.
Según el Departamento de Estado de los EE.UU., la producción total de cannabis en Marruecos para el año de cosecha 2015-2016 se estimó en 700 toneladas métricas, lo que podría representar hasta el 23% del PIB de Marruecos.
En 2019, el 80% del cannabis producido fue exportado. El canal de televisión británico BBC Arabic investigó recientemente el contrabando de cannabis entre Marruecos y los Países Bajos. Para los medios de comunicación, está claro que «los traficantes internacionales no pueden sacar de Marruecos grandes cantidades de drogas (mientras que las fronteras están bajo alta vigilancia) solo porque se benefician del apoyo de mandos de lo más alto nivel.