Ovidio Guzmán, el hijo del capo mexicano Joaquín ‘El Chapo‘ Guzmán, fue trasladado a Estados Unidos desde México para enfrentar cargos de tráfico de drogas, según informó el viernes por la noche el Departamento de Justicia.
Guzmán López, de 33 años, fue trasladado en avión a Chicago y se espera que comparezca ante un tribunal federal de Chicago en los próximos días.
“Hoy, como resultado de la cooperación policial entre Estados Unidos y México, Ovidio Guzmán López, líder del Cartel de Sinaloa, fue extraditado a Estados Unidos. Esta acción es el paso más reciente en el esfuerzo del Departamento de Justicia para atacar todos los aspectos de las operaciones del cartel», aseguró el Fiscal General Merrick B. Garland en una declaración publicada por el Departamento de Justicia.
Por su parte, en otra declaración, Liz Sherwood-Randall, Asesora de Seguridad Nacional, también confirmó la noticia y señaló que Ovidio Guzmán es acusado de narcotráfico, blanqueo de capitales y otros delitos violentos.
«La Administración Biden-Harris seguirá utilizando todas las herramientas disponibles para contrarrestar enérgicamente el azote mortal del fentanilo y otros estupefacientes que están matando a tantos estadounidenses», señaló.
El traslado se da cinco meses después de que las autoridades federales de EEUU revelaran amplios cargos contra cuatro de los hijos del líder de Sinaloa, por dirigir el cartel de su padre. También están acusados en Chicago Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Joaquín Guzmán López.
En total, el gobierno de EEUU iene en su contra 11 cargos penales relacionados con tráfico de drogas y manejo de una empresa criminal.
La recaptura de Ovidio Guzmán
Guzmán López fue capturado en enero por las fuerzas armadas mexicanas en un pequeño pueblo en las afueras de la ciudad de Culiacán, la capital del estado mexicano de Sinaloa.
Su arresto se dio en medio de una redada nocturna que se había estado preparando durante más de seis meses, dijeron funcionarios en ese momento.
El operativo que llevó a su captura se dio poco antes de la visita del presidente Joe Biden a México, quien visitó el país para la Cumbre de Líderes de América del Norte.
Tres años antes, el gobierno había intentado capturarlo, pero abortó la operación después de que sus aliados del cártel desencadenaron una ola de violencia en Culiacán, recordado como el “culiacanazo” del 17 de octubre de 2019.
Durante esa violenta jornada se registró la muerte de 30 personas, entre autoridades y presuntos pistoleros.
El ejército utilizó helicópteros artillados Black Hawk contra las ametralladoras calibre .50 montadas en camiones del cartel. Hombres armados del cartel atacaron dos aviones militares, obligándolos a aterrizar y enviaron hombres armados al aeropuerto de la ciudad, donde aviones militares y civiles fueron alcanzados por disparos.
Quién es Ovidio Guzmán
Heredero de una facción del poderoso Cartel de Sinaloa, Ovidio Guzmán López aprendió el negocio del narcotráfico de su padre, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán Loera.
Alias ‘El Ratón’ y ‘Ratón Nuevo’, este joven es acusado de estar involucrado en el imperio criminal que dejó Guzmán Loera, quien purga una condena de cadena perpetua en una cárcel de Colorado.
La Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) lo tiene en la mirilla desde abril de 2018, cuando se le formularon cargos en una corte federal en Washington DC por contrabando de sustancias ilícitas. Estados Unidos asegura que Ovidio Guzmán y su hermano Joaquín Guzmán López son parte del grupo que controla actualmente el Cartel de Sinaloa, con tentáculos que llegan hasta la compra de cocaína en Colombia.
Un cálculo conservador de las aurotidades estadounidenses señala que obtienen unos 10 millones de dólares al año por el polvo y las pastillas de fentanilo que producen en laboratorios ocultos en la sierra y en casas de Sinaloa. Esa mercancía es transportada en autos particulares que cruzan las garitas, por personas que la esconden bajo su ropa, camiones comerciales, paquetería aérea, en lanchas que navegan sigilosamente por el mar de California y también por túneles, el método que inventó su padre hace tres décadas.
Desde 2014, cuando tenía alrededor de 24 años, Ovidio Guzmán quedó al frente del primer laboratorio de fentanilo que fue instalado en una modesta casa de Culiacán.