Países bálticos, “paraíso” del lavado del dinero de Rusia

Estonia, Letonia y Lituania forman parte de la Unión Europea (UE), pero se volvió a extender la sombra de Rusia, esta vez para convertirlas en escenario del mayor caso conocido hasta el momento de lavado de dinero ruso en Europa.


Por Tn.com/AL


Una máquina de blanqueo de más de 200.000 millones de euros a través de filiales de bancos nórdicos. “Es inmenso”, asegura sobre el caso en una conversación telefónica Maira Martini, investigadora en Transparencia Internacional (TI). La cifra representa más de siete veces el PBI de Estonia.
Un fraude “inmenso” que llevó a buscar al banquero Aivar Rehe, de 56 años, había salido dos días antes de su casa, la policía encontró su cuerpo en las inmediaciones de su casa sin signos de violencia.
Rehe era el presidente de la filial del banco danés Danske Bank en Estonia y se había convertido en una pieza fundamental, quizás la última, para arrojar luz en el mayor escándalo de lavado de dinero ruso en la UE.


“La sucursal operaba una cartera enorme de ciudadanos no residentes que realizaban un volumen considerable de pagos”, afirma un informe de TI de agosto de 2018 en el que cifra en un 35% las ganancias de la filial generadas mayoritariamente por clientes rusos tan solo en 2012.


Danske Bank se vio obligada a admitir que entre 2007 y 2015 se hicieron “transacciones sospechosas” a sus filiales en Estonia por un valor total de 200.000 millones de euros. Una cantidad equivalente al PBI de Nueva Zelanda o Qatar.


Rehe, en una entrevista meses antes de morir, afirmó sentirse “responsable”, aunque no llegó a estar imputado. “El banco claramente no cumplió con su responsabilidad. Es decepcionante e inaceptable”, señaló el jefe de la entidad, Ole Andersen, en un comunicado de septiembre de 2018.


El Proyecto de Denuncia de la Corrupción y el Crimen Organizado (OCCRP, por sus siglas en inglés), la organización que filtró el escándalo, tiene gran penetración en Europa del Este, describe en una investigación cómo el dinero ingresó en este proceso de lavado “a través de un conjunto de compañías fantasma creadas en Rusia que existen solo sobre el papel y cuya propiedad no se puede rastrear”.


La gigantesca bola de nieve del lavado de dinero se fue haciendo más grande hasta salpicar también a Suecia. Brigitte Bonnesen, presidenta de Swedbank, presentó su renuncia hace casi un año por otro caso de lavado de dinero ruso en sus filiales bálticas cifrado en unos 5500 millones de euros, lo que provocó una devaluación del 38% de las acciones de la entidad, según Bloomberg.


Otro banco sueco, SEB Bank, admitió en un informe recogido por la prensa nórdica que en su filial estonia se lavaron unos 26.000 millones de euros entre 2005 y 2017. Ante los rumores previos a esta última investigación, las acciones de SEB Bank cayeron un 10%. Junto a la entidad Nordea, que suma alrededor de 700 millones de euros presuntamente blanqueados, ya son cuatro los bancos nórdicos utilizados como “lavanderías” de dinero ruso de dudosa procedencia en los países bálticos.


Pedro Felicio, entonces experto de Europol en blanqueo dice que “algunos países en el área del báltico son muy vulnerables al lavado de dinero, especialmente procedente de Rusia”.

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Actualidad

Inscribete en nuestros cursos Online