El titular de la SNI, Esteban Aquino, de Paraguay, afirmó que Gholamreza Ghasemi, uno de los tripulantes de la aeronave retenida en Ezeiza, tiene relación con el grupo paramilitar de la Guardia Revolucionaria de Irán. El gobierno argentino había asegurado que no se trataba de la misma persona.
Antilavadodedinero / Infobae
El caso del avión venezolano que fue retenido en el aeropuerto de Ezeiza con cinco pasajeros iraníes sigue sumando datos inquietantes, que multiplican el impacto y la preocupación de la comunidad internacional.
La novedad es que el ministro de Inteligencia del Paraguay, Esteban Aquino, afirmó que Gholamreza Ghasemi, el piloto de la aeronave retenida en la Argentina, está vinculado a la Fuerza Quds iraní, catalogada como terrorista por los Estados Unidos.
“Él ha estado acá (en Paraguay). Estuvo en nuestro territorio y eso es algo que sigue abierto y en investigación”, señaló el titular de la SNI en declaraciones a radio ABC Cardinal 730 AM. “La presencia de esa persona, de acuerdo a lo que sabemos y confirmaron agencias aliadas, es que se trata de una persona vinculada al Quds, sin ninguna duda. No es parecido, homónimo ni nada. Es preocupante”, remató en la misma entrevista.
La última aclaración se contradice con lo que el gobierno argentino había afirmado el pasado miércoles, cuando el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, informó que la Policía Federal había podido constatar que el piloto iraní que está en el país en realidad “es un homónimo” del que tiene participación en la Fuerza Quds. Sin embargo, el gobierno de Paraguay asegura que es la misma persona...
Gholamreza Ghasemi, sentado en el piso de una habitación del hotel argentino donde fueron alojados los tripulantes del avión que está retenido en Ezeiza
“Nosotros no tenemos la tecnología ni los medios para saber si esta empresa cambió de matrícula, de nombre, quién compró o vendió, pero sí tenemos agencias aliadas e hicimos las consultas”, explicó Aquino, quien lamentó algunas limitaciones: “Estamos restringidos por la ley. Hay cosas que lastimosamente no podemos decir”.
Luego, el funcionario consideró que lo relevante es decidir de qué lado estar: “Sabemos que existen países que financian y patrocinan el terrorismo. Nosotros no podemos ser tan ingenuos y no hacer las alertas correspondientes cuando ingresan personas que han estado directamente vinculadas en ese régimen de terror. Ya sea en el transporte de materiales, de tecnología, de armas, etc. tenemos que precautelar la vida de todos los ciudadanos, en toda la región”.
En ese contexto, Aquino destacó la labor de la Secretaría Nacional de Inteligencia que preside: “Cumplimos nuestro trabajo y obligaciones con patriotismo. A veces tenemos que soportar, tragar sapos y culebras. Hay gente que piensa que esto se puede politizar y trata de desprestigiar. Nosotros no nos involucramos en política partidaria porque esta Secretaría está al servicio de la Nación. Este caso aún está abierto y va a continuar”.
Además, el ministro de Inteligencia del Paraguay quiso destacar el accionar y la colaboración de de los países vecinos: “Uruguay tomó las acciones con mucha sabiduría. Y Argentina ha hecho un excelente trabajo, lo importante es que reaccionó y tomó todas las acciones”.
El avión venezolano que está parado en el Aeropuerto de Ezeiza
Vínculos peligrosos
La Fuerza Quds, a la que el capitán iraní retenido en Buenos Aires estaría vinculado, es el cuerpo responsable de las operaciones en suelo extranjero de los Guardianes de la Revolución iraní, señalados como grupo terrorista por EEUU e Israel.
La fuerza del régimen de Irán nació en 1979 tras la Revolución Islámica que depuso al Sha de Persia e instauró el actual régimen teocrático dirigido por los ayatolás. Se cree que actualmente cuenta con más 120.000 miembros destinados a unidades terrestres, navales y aéreas, y la Fuerza Quds. Además, controla a las milicias Basij, que suman otros 90.000 miembros.
También conocida como pasdaran (“guardianes” en farsi), esta fuerza paramilitar fue pensada como una rama de las Fuerzas Armadas de Irán encargada de proteger precisamente el régimen teocrático y la república islámica, a diferencia del rol más tradicional de protección de fronteras del ejército, la marina y la fuerza aérea.
Inquietud en la comunidad internacional
La noticia del avión retenido en la Argentina motivó una declaración de la embajada de los Estados Unidos: “Seguimos con interés las investigaciones de la tripulación y el avión, y agradecemos los esfuerzos de las autoridades”, señaló Marc Stanley, el máximo representante diplomático norteamericano en el país.
La embajada de Israel también emitió un comunicado para referirse al caso, pero lo hizo en términos mucho más duros: “El Estado de Israel está particularmente preocupado por la actividad de las compañías aéreas iraníes Mahan Air y Qeshm Fars Air en América Latina, empresas que se dedican al tráfico de armamento y al traslado de personas y equipos que operan para la Fuerza Quds, las cuales están sancionadas por Estados Unidos por estar involucradas en actividades terroristas”.
“Los hechos recientes dan cuenta de los intentos sostenidos de la República Islámica de Irán, a través de la Guardia Revolucionaria y la Fuerza Quds, para continuar consolidando su influencia en todo el mundo, incluso en Sudamérica, como base para acciones terroristas en el continente. Esta situación se suma a otras operaciones registradas en los últimos meses como el intento de asesinato de ciudadanos israelíes en la ciudad de Bogotá por parte de criminales que trabajaban para la Fuerza Quds en Colombia”.
La Embajada, actualmente a cargo de Galit Ronen, recordó que la Argentina fue víctima de dos atentados terroristas perpetrados por Irán (a la propia Embajada de Israel, en 1992, y a la sede de la AMIA en 1994) y planteó la importancia de mantener un mensaje firme para que Teherán no vuelva a intentar actuar en suelo argentino ni en ningún otro país de la región.