El Gobierno de Paraguay presentará un proyecto para que los militares puedan combatir el crimen organizado, permitiendo que operen en zonas fronterizas, penitenciarias y en aeropuertos, informó la Presidencia.
«El Presidente Marito Abdo Benítez anunció que la próxima semana presentará un proyecto de enmienda a fin de dar atribuciones a las Fuerzas Armadas para combatir al crimen organizado», informó Presidencia en su cuenta de Twitter.
El anuncio del Ejecutivo se da horas después de que un policía paraguayo falleciera tras un tiroteo con supuestos integrantes del grupo criminal brasileño Comando Vermelho.
La Policía señaló que 8 desconocidos habrían atacado a tiros a patrulleros y a un camión de traslado de internos para rescatar al líder del Comando Vermelho, Jorge Teófilo Samudio González, alias Samura, quien logró escapar en medio del enfrentamiento.
De acuerdo al presidente, el incidente genera un mayor compromiso para seguir luchando frontalmente contra las bandas criminales.
El mandatario añadió que desde que asumió sus funciones con la «firme» decisión de luchar contra el crimen organizado, sabía que esto tendría sus consecuencias.
«Reafirmo mi voluntad de presentar la semana que viene un proyecto de enmienda para darle una nueva misión y darle una cobertura constitucional a la Fuerza Armada de la Nación (…) Hoy y en el mundo las Fuerzas Armadas ya cumplen un rol diferente y son más protagonistas en la lucha contra el crimen organizado», afirmó.
Sostuvo que existe la necesidad de adecuar las Fuerzas Armadas a las funciones que la sociedad moderna necesita y contribuir para «equilibrar la batalla desigual» que actualmente se lleva a cabo entre las fuerzas del orden público y el crimen organizado.
El 7 de septiembre, Abdo Benítez dijo que las Fuerzas Armadas tienen una «capacidad ociosa» y que actualmente no pueden operar contra el crimen organizado.
Consideró que los militares deberían operar en las zonas fronterizas, penitenciarias y en las zonas de los aeropuertos del país para combatir a los criminales.
La Secretaría Antidrogas dijo el 4 de septiembre que durante este año de Gobierno se incautaron 4.400 kilos de cocaína y 44 millones de kilos de marihuana fueron destruidos, lo que generó un perjuicio de más de 150 millones de dólares a las estructuras criminales.
ALD/sputniknews