El Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) mejorará la supervisión de las entidades financieras de Irán respecto de actividades de lavado de dinero, dijo en un comunicado el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo.
«Hoy el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) respondió al intencional fracaso de Irán para enfrentar las deficiencias sistemáticas en materia de lavado de dinero y financiación al terrorismo mediante el requerimiento de mayor supervisión a las instituciones financieras con sede en Irán», dijo Pompeo en el comunicado.
El funcionario agregó que «la república islámica suele echar mano al engaño y los subterfugios para financiar sus actividades ilícitas, amenazando la integridad y la seguridad del sistema financiero internacional».
El secretario de Estado aseguró en su declaración que el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica persiste en esquemas de financiación ilícita, que incluyen apoyo a organizaciones consideradas terroristas por EEUU, como Hizbolá y Hamás.
Estos «esquemas ilícitos son facilitados por los más altos niveles del Gobierno de Irán», sostuvo Pompeo.
«La GAFI también reafirmó su preocupación acerca de la financiación al terrorismo procedente de Irán y la amenaza que esta entraña para el sistema financiero internacional. Tres años después de que Irán se comprometiera con la GAFI en un plan de trabajo, la mayor parte de esa labor no se ha completado», agregó Pompeo.
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos reclamó a Teherán que ratifique las convenciones de Palero y contra la Financiación del Terrorismo para alinearse con los estándares de la GAFI o de lo contrario enfrentará nuevas medidas.
La GAFI fue creada en 1989 por los ministros de finanzas de sus países miembros, entre los cuales se cuentan Estados Unidos y Rusia, para establecer normas legales, regulatorias y operacionales para combatir el lavado de dinero, la financiación al terrorismo y amenazas vinculadas a la integridad del sistema financiero internacional.