¿Por qué Joe Biden apunta ahora a las criptomonedas?

En la industria blockchain persiste la idea de que los reguladores estadounidenses podrían intentar “matar a cripto” o frenar el crecimiento de este innovador sector. Esta preocupación se vio amplificada por la controvertida propuesta de la administración Biden de aplicar un fuerte impuesto a Bitcoin y a los mineros de criptomonedas.

Contrariamente a la creencia popular, el entorno legal que configura el futuro de las criptomonedas está lejos de ser una sentencia de muerte. Por el contrario, supone un complejo baile entre innovación y cumplimiento.

Con la dinámica del año electoral ralentizando el progreso legislativo, la industria se queda a la espera de proyectos de ley que puedan proporcionar una dirección clara.

Aunque los líderes del sector siguen siendo optimistas sobre el futuro, subrayando la importancia de que las empresas blockchain se preparen para cumplir con las posibles leyes, la administración Biden pretende introducir un impuesto dirigido a Bitcoin y a los mineros de criptomonedas.

Esta medida ha despertado una gran preocupación entre los inversores del sector, que temen que pueda paralizar el sector en crecimiento. La propuesta de ingresos para 2025 del Departamento del Tesoro de Estados Unidos contempla un impuesto del 30% sobre los costes de electricidad de los mineros de criptomonedas.

Se trata de una medida que podría tener implicaciones sísmicas para el sector. El Departamento del Tesoro mostró:

“Cualquier empresa que utilice recursos informáticos, ya sean de su propiedad o alquilados a terceros, para minar activos digitales estaría sujeta a un impuesto especial equivalente al 30% de los costes de la electricidad utilizada en la minería de activos digitales.”

Obligaciones tributarias en criptomonedas en Estados Unidos.
Obligaciones tributarias en criptomonedas en Estados Unidos. Fuente: FMI

Muchos consideran que este impuesto, denominado impuesto sobre la energía de la minería de activos digitales (DAME, por sus siglas en inglés), supondría la sentencia de muerte para la minería de criptomonedas. Los críticos argumentan que un impuesto de este tipo ahogaría la innovación y obligaría a las operaciones mineras a deslocalizarse.

Joe Biden y su postura con las criptomonedas

Se trata de un escenario similar al éxodo presenciado en China en 2021. Por lo tanto, Estados Unidos podría ver cómo su dominio disminuye a medida que los mineros buscan entornos más hospitalarios. Cynthia Lummis dijo:

“Un impuesto punitivo propuesto del 30% sobre la minería de activos digitales destruiría cualquier punto de apoyo que la industria tenga en Estados Unidos.”

Mientras continúa el debate, las implicaciones más amplias para la economía estadounidense y su posición en el mercado de las criptomonedas siguen siendo inciertas. La propuesta de la administración Biden señala un enfoque cauteloso hacia la industria cripto.

Con el Bitcoin y las valoraciones de las criptomonedas experimentando un resurgimiento, este enigma regulatorio refleja un momento crucial para la industria blockchain. Sin embargo, Joshua Kershner, Consejero General de la Fundación Helium, dijo a BeInCrypto que el futuro de la industria no depende de las complejidades operativas de las plataformas centralizadas.

En su lugar, se basa en el desarrollo de aplicaciones blockchain con casos de uso tangibles y de valor añadido.

EEUU: Adhesión a las guías de regulación de las criptomonedas

A pesar del escrutinio legal sobre las entidades centralizadas, otros proyectos que se extienden más allá del trading de tokens o la minería parecen no inmutarse, apuntando a un ecosistema blockchain más amplio y resistente.

El hecho de que las acciones reguladoras, como el acuerdo de la CFTC con Binance, se centren en malas prácticas específicas pone de relieve que no todas las facetas del sector blockchain están bajo asedio. Según Kershner, es un recordatorio de la necesidad de que las empresas de criptomonedas se adhieran a estrictos requisitos reglamentarios.

Estos incluyen el cumplimiento de sanciones, medidas contra el blanqueo de dinero y protocolos KYC. Kershner hizo hincapié en la naturaleza distinta de los proyectos blockchain, en particular sus características inmutables, que exigen un enfoque de cumplimiento desde el principio.

A diferencia de las entidades de Web 2.0, que pueden adaptar los marcos jurídicos tras su lanzamiento, las iniciativas de blockchain requieren una previsión integral del cumplimiento, lo que refleja los retos normativos únicos del sector:

“Con Web3, es fundamental contar desde el principio con asesores internos experimentados que trabajen con los equipos de ingeniería y producto para garantizar que los productos se construyen teniendo en cuenta el cumplimiento antes de que se lancen con características inmutables. Es mucho más difícil poner tiritas normativas a un proyecto de blockchain que a una empresa típica de Web2.”

Además, la omnipresencia del trading con información privilegiada en Web 3.0 es un reflejo de las industrias tradicionales. Ello afirma la universalidad de las normas jurídicas en todos los paradigmas tecnológicos. Esto apunta a una mayor necesidad de claridad legislativa y adaptabilidad para dar cabida a los distintos atributos de la tecnología blockchain.

EEUU: El mercado de las criptomonedas

Kershner aconsejó a las nuevas empresas que se introducen en el mercado de las criptomonedas que se hagan “abogados” a la luz del actual entorno normativo:

“La necesidad de innovación y crecimiento no está reñida con el cumplimiento de la normativa y la protección de los inversores. El problema al que se enfrenta el sector es que la incertidumbre normativa dificulta o impide el cumplimiento, especialmente a escala mundial. Contrate pronto a un abogado interno para que le asesore estratégicamente a medida que vaya creciendo. Reconozca que el sector aún es nuevo y que las cosas cambiarán rápidamente en los próximos años.”

En última instancia, el afán de claridad regulatoria y la necesidad de cumplimiento reflejan una visión compartida de un futuro en el que la tecnología blockchain pueda florecer de forma responsable e innovadora dentro de un marco legal de apoyo.

La cuestión no es si los reguladores estadounidenses están intentando acabar con las criptomonedas, sino cómo pueden. Junto con las partes interesadas del sector, fomentar en colaboración su crecimiento e integración en el tejido de las finanzas y la tecnología mundiales.

esbeincrypto

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Actualidad

Inscribete en nuestros cursos Online