Según autoridades locales de Tandarei, el virus se expandió en el lugar luego de que cientos de personas regresaron allí hace semanas desde varios países europeos.
Antilavadodedinero / diariolibre.com
Las autoridades de Rumanía han decidido aislar del resto del país la localidad de Tandarei, una supuesta base de operaciones de una conocida red internacional de mendicidad y tráfico de personas, después de que se dispararan allí las infecciones de coronavirus.
Según médicos y autoridades locales citadas por el portal de investigación recorder.ro, el brote en Tandarei, en el sureste del país, se desató cuando cientos de personas regresaron allí hace semanas desde varios países europeos.
La mayoría vino de países como España, Italia o Alemania, donde los retornados se ganaban la vida, asegura la prensa rumana, que informa desde hace días de este caso.
Varios vecinos se han presentado en el hospital provincial con síntomas de COVID-19 y algunos de ellos incluso han muerto, desatando el pánico entre los demás habitantes.
Condenados en el Reino Unido
En los últimos años, más de cien vecinos de Tandarei han sido condenados a penas de cárcel en el Reino Unido por delitos de tráfico de personas y lavado de dinero.
Según la justicia británica, los condenados forman parte de una red de tráfico de personas que hace negocio enviando a menores y otras personas de su propia comunidad al Reino Unido para que hicieran dinero a través de la mendicidad y el robo.
Tanto los condenados como sus víctimas son de etnia gitana, que en Tandarei supone un tercio de una población estimada en 13.000 habitantes.
Aunque las autoridades rumanas obligan a todos los que entran en el país procedentes de zonas de riesgo a aislarse en sus casas, muchos no cumplieron la norma en Tandarei y siguieron haciendo vida normal.
Todo empezó con un entierro
Según dijo anoche la alcaldesa de la localidad, Nicoleta Toma, en unas declaraciones al canal Digi24, unas 370 personas están aisladas en sus casas tras haber regresado del exterior.
Pese a ello, algunos de los que han vuelto ‘se han paseado sin ton ni son’ por la localidad desafiando las restricciones vigentes que limitan la circulación a salir a comprar o ir al médico, advirtió la edil.
‘Todo empezó con un entierro de la comunidad gitana hace dos semanas’, explicó un médico local a recorder.ro.
‘A partir de ahí los casos empezaron a extenderse en cascada’, agregó el facultativo.
Los datos oficiales parecen darle la razón. Según el Ministerio del Interior, 31 de los 48 casos registrados en la provincia de Ialomita se han detectado en Tandarei, donde además se han producido siete de las ocho muertes por coronavirus registradas en la provincia.
Cuarentena en familias numerosas
Un vecino de Tandarei contactado por Efe por teléfono confirmó que muchos vecinos rompieron durante semanas la cuarentena tras regresar de otros países europeos.
Sin embargo, las calles están vacías -aseguró la fuente- desde que el Gobierno enviara policías, gendarmes y militares para hacer cumplir la cuarentena y el cierre decretado de la ciudad, que durará al menos hasta el próximo 16 de abril.
Además de haber pedido refuerzos policiales, el ayuntamiento de Tandarei y la prefectura de Ialomita también han solicitado que se realicen más test de COVID-19 a personas con síntomas.
El ayuntamiento también ha pedido más apoyo del Gobierno central para encontrar formas de separar a posibles infectados de sus familias.
Muchos de los que deben estar aislados, explicó la alcaldesa, forman parte de familias numerosas en las que tres generaciones conviven en la misma casa.