El operador que gestiona el New York Stock Exchange (NYSE), mercado bursátil neoyorquino, ofrece la oportunidad de invertir en bitcoins, aportando un poco más de reconocimiento a la moneda virtual.
La operaciones iniciaron en la apertura de los intercambios electrónicos, a las 20H00 en Nueva York, media noche GMT.
Los corredores podrán entonces intercambiar los contratos a futuro de bitcoin en una de las plataformas de la Bolsa Intercontinental (ICE), es decir aportar por un alza o baja del valor de la criptomoneda, como en el caso del petróleo o el oro.
La subsidiaria de moneda virtual del ICE, Bakkt, conduce la operación. Cuando se puso en marcha en agosto de 2018, se fijó el objetivo de iniciar los intercambios en noviembre, pero el proyecto se retrasó.
Ya es posible comprar y vender bitcoins directamente en una multitud de pequeñas plataformas que no tienen la legitimidad histórica y oficial de la casa matriz de la Bolsa de Nueva York, la principal figura de Wall Street.
Otro gran operador bursátil, la Bolsa Mercantil el Chicago (CME), ofrece desde finales de 2017 contratos a futuro de criptomeneda. Desde principios de este año, unos 7.000 de estos contratos circulan a diario por un valor total de más de 350 millones de dólares, al precio actual.
Cuando expiren los contratos a futuro CME, los clientes recibirán el equivalente en dólares del valor de los bitcoins. La idea es evitar que los inversores sean propietarios de bitcoins.
Los productos ofrecidos por Bakkt son diferentes porque los corredores recibirán bitcoins directamente. Entonces podrán decidir confiar a Bakkt la custodia de la propiedad, en una especie de almacén virtual seguro.
«Nuestro primer objetivo es proporcionar un ecosistema en el que podamos tener confianza», señaló la jefa de Bakkt, Kelly Loeffler, poco después de que las autoridades estadounidenses dieran luz verde a estas operaciones a mediados de agosto.
Bakkt espera superar la resistencia de los inversores institucionales, que siguen desconfiando de esta moneda virtual.
La empresa lanzó en todo caso sus productos antes de la llegada de Libra, la moneda virtual que Facebook se propone lanzar en 2020, pero que despierta preocupación tanto entre los presidentes de los bancos centrales como entre los responsables políticos.
ALD/AFP