Apenas un 30% de las empresas españolas cuenta con un seguro específico para cubrirse frente a un ciberataque, pese a que los datos del Instituto de Nacional de Ciberseguridad (Incibe) hayan revelado que solo en 2023 se gestionaron más de 22.000 incidentes de ciberseguridad, según Lazarus Technology.
De acuerdo con el proveedor global de ciberseguridad, aunque los ciberataques sean cada vez más frecuentes, no tienen la consideración de otros siniestros habituales, como los incendios o los daños por agua.
«De este modo, si bien es habitual que una póliza multirriesgo incluya un seguro contra un fuego, es poco frecuente que cubra un ataque cibernético, cuya naturaleza es distinta, aunque también genera un daño material», han explicado desde Lazarus.
Esta falta de cobertura provoca que las empresas españolas tengan «un alto grado de exposición», sobre todo cuando el coste promedio de un ciberataque puede ser hasta 14 veces mayor al de un incendio, llegando a superar los 100.000 euros.
Además, si se tiene en cuenta que el tejido empresarial en España está conformado en un 99% por pymes, puede producirse una paralización de la actividad durante un tiempo determinado con un coste por lucro cesante que puede oscilar entre los 5.000 y los 50.000 euros diarios e, incluso, su cierre.
Sobre esto último, la compañía de ciberseguridad ha mencionado el informe ‘Panorama actual de la ciberseguridad en España’ de Google, donde se concluye que el 60% de las pymes europeas, incluidas las españolas, se ven obligadas a cerrar a los seis meses posteriores a sufrir un ciberataque.
«Las pymes consideran erróneamente que, dado el tamaño de sus negocios, son poco atractivas para recibir un ciberataque o, sencillamente, que como nunca ha pasado, no tiene por qué pasar. La mejor defensa no puede ser la sensación de insignificancia o el azar, sino optar por un ciberseguro que mitigue cualquier ataque informático y no ponga en riesgo la existencia de la empresa», ha señalado el consejero delegado de Lazarus Technology, Manuel Huerta.
A propósito de esta falta de concienciación, el proveedor de ciberseguridad ha añadido las investigaciones del Incibe, el cual ha mostrado que un 55% de las pymes no se protege por esta razón frente a un ciberseguro, que «cubriría no solo la respuesta ante los ataques cibernéticos, sino también los costes de recuperación o sanciones por incumplimiento normativo».