El exlíder del partido ultraderechista austriaco, Heinz-Christian Strache se retira de la política mientras se investigan las acusaciones contra él sobre malversación de dinero de la formación y no aspirará a ningún cargo político.
El político llevó al partido a lo más alto con un 26% de los votos en las elecciones de 2017 y se convirtió en vicecanciller del Gobierno de coalición impulsado por el conservador Sebastian Kurz.
Strache presentó como una víctima de conspiraciones contra él y aseguró que ahora se centrará en su familia y en su defensa para esclarecer los procedimientos judiciales que le afectan. “Me disculpo ante los militantes a los que haya podido defraudar”, ha afirmado antes de enfatizar que pretende evitar “a cualquier precio una división” del partido al que ha dedicado su carrera política.
Además, planteo la posibilidad de presentarse el año próximo en las elecciones municipales de Viena. Según medios austriacos, de que podía barajar una lista propia separada del FPÖ, donde sigue teniendo muchos seguidores.
“No aspiro a ningún cargo político”, afirma Strache y sostiene que todas las acusaciones contra él son falsas.
El País