Dulcidio De La Guardia, ex ministro de Economía y Finanzas, descomprometió los pagos que debía hacer y los pospuso para otras partidas a pesar de que éstos estaban ya contemplados, fue a parar a la administración Varela con deudas que superaron los $1,500 millones.
Por PrensaPanamá/ALD
Por su parte, el exministro dijo que cumplió con la Ley de Responsabilidad Fiscal, que limita el endeudamiento del Estado al 2% del Producto Interno Bruto; pero acumuló la deuda al punto que la administración de Laurentino Cortizo tuvo que modificar la ley y ampliar el nivel de endeudamiento al 3.5% del PIB para poder hacer frente a los compromisos que dejó pendientes su gobierno antecesor.
Tal vez, De La Guardia cumplió con el nivel de endeudamiento requerido por ley, como él mismo lo reconoció, descomprometiendo las partidas y aplazándolas para años posteriores, pero la deuda no dejó de crecer.
Por otra parte, la administración Varela, obligó a Cortizo a solicitar préstamos de la banca estadounidense y emitir bonos por la suma de $3,300 millones, situación que miran con lupa los organismos financieros internacionales por la posibilidad de que se rompa con el límite de 40% en la relación deuda – Producto Interno Bruto que supuestamente durante la administración Varela alcanzaba 38%.
Ahora un reporte del Bank of América y Merryl Lynch analizan la deuda en Panamá, advierte que el deterioro de las finanzas públicas podría poner en riesgo el rating de crédito del país.
Para los economistas, descomprometer una partida, equivale a desconocer una deuda, o ‘borrar’ una cuenta por pagar de la partida asignada y ‘patearla’ para la siguiente vigencia fiscal. Esto, a pesar de que el presupuesto del siguiente año ya estaba comprometido y no contemplaba el compromiso pospuesto.
Esta es la respuesta a la deuda que encontró el gobierno de Laurentino Cortizo Cohen, cuando relevó a Varela en julio de 2019, y se topó con más $1,500 millones por pagar a proveedores, bancos y contratistas del gobierno.
Además, la política preelectoral parecía ser un factor determinante para facilitar los pagos para allegados del Presidente, diputados opositores que buscaba tener de su lado el gobierno, contratos nuevos, o propaganda política.
El uso de los dineros del Estado parecía responder, en parte, a compromisos políticos antes que otras necesidades: “Popi (José Luis ‘Popi’ Varela, hermano del presidente y diputado) te va a pedir algo para una empresa allegada a Yanibel (Ábrego, diputada de partido Cambio Democrático), apóyalo», le pidió Varela al exministro.