El policía elaboró a petición de la compañía de Ignacio Sánchez Galán un informe confidencial con los supuestos puntos débiles del expresidente de Endesa para usarlos en su contra.
Iberdrola no solo habría utilizado a Villarejo para desbloquear proyectos millonarios como su central de ciclo combinado de Arcos de la Frontera (Cádiz). La compañía con domicilio en Bilbao también contrató al policía en 2004 para conseguir información comprometedora sobre Manuel Pizarro, presidente en aquellos momentos de Endesa, su gran rival en el sector eléctrico.
El presunto cabecilla de la operación Tándem rastreó la vida privada, las amistades, los vínculos societarios y la trayectoria profesional de Pizarro y condensó sus supuestos hallazgos en un informe que entregó a su contacto en Iberdrola, Antonio Asenjo, actual jefe de seguridad de la compañía y uno de los hombres de confianza de su presidente, Ignacio Sánchez Galán.Fragmento del informe BlackBoard. (Pinche para ampliar)
El propio documento, en una investigación conjunta con ‘Moncloa.com‘, revela que la investigación fue encargada personalmente por Asenjo. “A requerimiento de AS [el nombre en clave que dio Villarejo a Antonio Asenjo], que actúa en nombre y representación de (CLIENTE -K-) [Iberdrola], personal de este GABINETE DE INVESTIGACIÓN y ANÁLISIS (GIA) se ha desplazado a diferentes lugares, contactado con numerosas personas y consultado determinados bancos de datos, a fin de recabar la información precisa para valorar si el proyecto encomendado (a partir de ahora BB – BlackBoard) pueda conseguirse con los procedimientos concertados y los plazos previstos de ejecución”.
“Ese cromo lo necesitan los de arriba”
El informe, de una veintena de páginas de extensión, también especifica que Iberdrola encargó a Villarejo la investigación sobre Pizarro en una reunión confidencial que mantuvo Asenjo con el comisario el 2 de septiembre de 2004.
Aunque la orden fue transmitida por el director de seguridad de la compañía, el documento reconoce que “el trabajo se realiza fundamentalmente con el fin de que se pueda disponer de medios y elementos necesarios para defenderse de los presumibles ataques que a corto, medio plazo, va a continuar realizando BB, especialmente tanto a la situación de la que K disfruta en el sector como singularmente en la toma de decisiones, entorno personal y contactos del CONSEJERO DELEGADO (CD)”, el puesto que ocupaba en aquellos momentos Sánchez Galán, que no ascendió a la presidencia de Iberdrola hasta 2006.
Fragmento del informe BlackBoard. ( ampliar)
Grabaciones a las que también ha tenido acceso este diario revelan hasta qué punto era una prioridad para la segunda empresa más grande del Ibex 35 encontrar cualquier punto débil en Endesa o en sus máximos responsables, por pequeño que fuera. En una conversación registrada por Villarejo, Asenjo asegura precisamente que el “cromo” que más le interesa conseguir es la supuesta relación de su competidora con el PSOE en Andalucía. “Ese cromo… Lo necesitan los de arriba para… Para intercambiar”, afirma tajante el directivo. En otro de los cortes, Asenjo insiste de nuevo al presunto cabecilla de Tándem: “Es importante para nosotros… El tema de Endesa”.
El comisario se tomó en serio el encargo. A lo largo de las páginas del denominado proyecto BlackBoard, diseccionó de forma exhaustiva los datos personales de Pizarro, la identidad y fecha de nacimiento de sus familiares directos, los domicilios de todos ellos, su currículo académico, sus años como presidente de la Bolsa de Madrid y el resto de su trayectoria profesional, sus amistades, sus contactos laborales, sus vínculos con el Gobierno de José María Aznar y sus supuestas conexiones con el Gobierno socialista de Manuel Chaves por Sevillana de Electricidad.
Los supuestos puntos débiles de Pizarro
Con todo, Villarejo centró su atención en los teóricos “puntos oscuros” de la trayectoria del entonces presidente de Endesa.
El comisario no halló ningún elemento que pudiera ser utilizado por su cliente contra Pizarro, pero apuntó una línea de trabajo que, a su juicio, podía ser fructífera en el futuro. “La hipótesis más viable (que se refuerza con alguno de los testimonios ya recogidos), es que su participación en sociedades durante el periodo de bolsa se haya realizado a través de testaferros.
La localización de estas sociedades, las personas interpuestas en las mismas, la acreditación de la relación existente entre ambas y la verificación de existencia de actividades de dudosa actividad constituyen el objetivo principal de este proyecto”, apunta el informe.
El agente encubierto menciona en concreto un supuesto uso de “información privilegiada” en las operaciones con las que Endesa entró en el accionariado de Fecsa y Sevillana de Electricidad, así como presuntos pagos que Pizarro habría recibido por cooperar de algún modo con la eléctrica, desde la presidencia de la Bolsa de Madrid, para garantizar el éxito de esas adquisiciones.
En todo caso, Villarejo admite que para poder demostrar esas supuestas acusaciones, sobre las que no tenía más que meras elucubraciones, necesitaba seguir profundizando en sus pesquisas. “Al tratarse de un objetivo MUY SENSIBLE, han de extremarse las medidas de obtención de información, de transmisión y de posterior utilización de la misma, a fin de evitar dañar los intereses de K [Iberdrola], con especial atención a evitar la detección de las investigaciones en curso”, reconocía el policía en el documento.
Después del proyecto Arrow
Este espionaje clandestino, que no había trascendido hasta la fecha, se habría producido solo unas semanas después de que terminara el denominado proyecto Arrow, otro encargo de Iberdrola al policía para que investigara a los líderes políticos y vecinales y a un juez que amenazaban con bloquear la construcción de su central de ciclo combinado de Arcos de la Frontera (Cádiz).
En ese otro trabajo, igualmente ordenado por Asenjo, Villarejo llegó a infiltrarse en una plataforma ecologista contraria a la planta y colocó publicidad en varios medios de la zona para intentar que apoyaran la infraestructura.
Pizarro ha preferido no realizar ningún comentario sobre estas revelaciones. Por la misma postura han optado Endesa e Iberdrola, que han declinado valorar estas afirmaciones.
ALD/Elconfidencial