Se indaga por lavado de dinero al hijo del presidente de Brasil

Flavio Bolsonaro, uno de los hijos del actual Presidente de Brasil,  enfrenta una investigación de la justicia por lavado de dinero y hace poco se ordenó el levantamiento del secreto fiscal y bancario. Su padre ha señalado que se busca perjudicar su gestión.

El senador electo rechazó las sospechas de presuntos movimientos financieros ilícitos y las atribuyó a “maniobras” para debilitar al gobierno de su padre, el presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro. La decisión judicial, que data del 24 de abril, fue revelada el pasado 13 de mayo por el   diario O Globo. 

La orden de ruptura del secreto, según el impreso, abarca también al exchofer del senador, Fabrício Queiroz, su exposa, la esposa de Flavio Bolsonaro, una empresa de la pareja, más de 80 exfuncionarios del antiguo gabinete del senador, sus familiares y empresas, y otros empresarios del área inmobiliaria supuestamente relacionados con el político brasileño.

En el caso de Bolsonaro, la medida, precisó O Globo, comprende el periodo 2007-2018, cuando el político era diputado de Río de Janeiro.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro,  junto a sus hijos.

En un comunicado, el senador Bolsonaro dijo que el secreto bancario de sus cuentas ya había sido roto “ilegalmente, sin autorización judicial” y que sus informaciones detalladas bancarias habían sido divulgadas. 

“Sólo ahora intentan una maniobra para calentar informaciones ilícitas que ya poseen hace varios meses”, apunta el texto escrito en primera persona.

“La verdad prevalecerá, puesto que no he hecho nada errado y no conseguirán usarme para golpear al gobierno de Jair Bolsonaro”, agregó el legislador.

Entre los exfuncionarios que fueron incluidos en la medida se encuentran la mamá y la hermana de Adriano Magalhaes da Nobrega, señalado por la Fiscalía de Río de Janeiro como figura importante de un grupo de milicias sospechoso de haber participado en el asesinato de la concejala Marielle Franco en 2018.

La investigación que puso bajo la mira a Flavio Bolsonaro, de 38 años, y Queiroz, su exchofer y exasesor,  comenzó el año pasado luego de que un informe del Consejo de Control de Actividades Financieras detectara movimientos bancarios de hasta 1,2 millones de reales en 2016 (344.500 dólares al cambio promedio de ese año) en una cuenta de Queiroz, una suma aparentemente incompatible con sus ingresos como conductor.

Según relata el Ministerio Público de Río de Janeiro (MPRJ) en un documento obtenido por la revista Veja y replicado en periódicos locales, el hijo del mandatario compró y vendió 19 inmuebles en Río de Janeiro entre 2010 y 2017, en transacciones con las que habría obtenido un lucro de más de tres millones de reales (790 mil dólares).

ALD/Paginasiete

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