Samantha Marie Elhassani, también conocida como Samantha Sally, de 34 años, ex residente de Elkhart, Indiana, se declaró culpable por ocultar el financiamiento del terrorismo.
El Fiscal General Adjunto para Seguridad Nacional John C. Demers, el Fiscal Federal para el Distrito Norte de Indiana Thomas L. Kirsch II, el Director Asistente del FBI de la División de Contraterrorismo Mike McGarrity y el Agente Especial del FBI a cargo de la oficina local de Indianápolis Grant Mendenhall hicieron el anuncio.
El Fiscal General Adjunto de Seguridad Nacional. John C. Demers dijo que “Elhassani admitió que viajó al extranjero y preposicionó más de $ 30,000 en efectivo y oro, sabiendo que los fondos serían utilizados por su esposo y cuñado para unirse y apoyar al ISIS en Siria”.
“La División de Seguridad Nacional se compromete a identificar y responsabilizar a quienes apoyan a organizaciones terroristas extranjeras. Quiero agradecer a los agentes, analistas y fiscales responsables de este resultado ” apuntó el fiscal
Samantha Elhassani se declaró culpable de proporcionar apoyo financiero a las personas que deseaban apoyar a ISIS, una organización terrorista que ha cometido actos de violencia contra los estadounidenses “, dijo el fiscal federal Thomas L. Kirsch II para el Distrito Norte de Indiana.
“Ella viajó con su esposo y cuñado a Siria, quienes se convirtieron en combatientes del ISIS, poniendo en riesgo la vida de sus hijos. La declaración de culpabilidad de ayer de los cargos federales de terrorismo refleja la seriedad de su conducta criminal. Mi oficina está comprometida a enjuiciar a quienes brindan apoyo a organizaciones terroristas. ” indicó
Dijo el agente especial a cargo Grant Mendenhall, FBI Indianápolis. “La acusada también expuso a sus hijos pequeños e impresionables a un ambiente de odio y violencia sin tener en cuenta el daño que les estaba causando”.
Entre noviembre de 2014 y abril de 1015, Elhassani ayudó a los dos hombres a unirse a ISIS haciendo múltiples viajes a Hong Kong y transportando más de $ 30,000 en efectivo y oro desde los Estados Unidos y depositándolo en una caja de seguridad en Hong Kong.
Se presume que Elhassani derritió el oro para que pareciera joyas y no reveló el efectivo y el oro en los formularios de declaración de aduanas. Cuando Elhassani transportó el dinero y el oro, sabía que su esposo y cuñado habían expresado su interés en unirse a ISIS y que tenían la intención de utilizar estos recursos para apoyar a ISIS.
En julio de 2018, Elhassani fue transferido de la custodia de las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) a la custodia policial estadounidense. El juez federal de distrito Philip P. Simon presidió la audiencia y estableció la sentencia para el 5 de marzo de 2020.
El caso fue investigado por la División de Indianápolis del FBI y la Fuerza de Tarea Conjunta contra el Terrorismo. Está siendo procesado por la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos para el Distrito Norte de Indiana y la Sección de Contraterrorismo de la División de Seguridad Nacional.
