El hondureño Geovanny Fuentes Ramírez es acusado de distribuir cantidades masivas de cocaína a Estados Unidos y dirigir un laboratorio secreto de drogas, en colaboración con el actual presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández.
Antilavadodedinero / univision
Un fiscal federal en un tribunal de Nueva York acusó el martes al empresario hondureño Geovanny Fuentes Ramírez de distribuir cantidades masivas de cocaína a Estados Unidos en colaboración con el actual presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández.
Fuentes «era una pieza clave del narcoestado hondureño… un poderoso e intocable narcotraficante que ganó millones ayudando al presidente a traficar con cocaína», dijo el fiscal Jacob Gutwillig en su declaración de apertura ante el jurado.
El empresario, acusado de narcotráfico y posesión de armas ilegales, dirigía un laboratorio secreto escondido en las montañas de Honduras «donde producía enormes cantidades de cocaína», alegó el fiscal.
«Su negocio de la cocaína prosperó gracias a su conexión con la policía y los políticos (…) el acusado los sobornó a todos, comprados y pagados», prosiguió, enumerando a alcaldes, miembros del Congreso, generales del ejército – y el presidente Hernández. Cuando el dinero no era suficiente, el acusado arreglaba el problema (…) compró a los que pudo y mató a los que no pudo», añadió la acusación fiscal.
En su declaración de apertura, el abogado defensor Eylan Schulman advirtió al jurado que no se fiara de las palabras de los narcotraficantes confesos que serían llevados a testificar contra su cliente, al que describió como «un hombre inocente, acusado erróneamente de delitos muy graves».
Testimonio de exnarcos
Si los miembros del jurado utilizan su «sentido común», dijo, «verán que el caso del gobierno depende de testigos con intereses propios que tienen mucho que ganar y poco que perder».
Los testigos del gobierno estaban «desesperados» por evitar una larga condena en la cárcel y habían admitido el contrabando de toneladas de droga y decenas de asesinatos», agregó el abogado Schulman.
Se espera que los fiscales llamen a testificar a varios exnarcotraficantes. Devis Rivera Maradiaga, del violento grupo ‘Los Cachiros’ que ha sido testigo estrella en varios juicios notables, podría estar acompañado por su hermano Javier en el estrado por primera vez.
El gobierno también pudo contar con el testimonio de dos testigos protegidos, incluido uno que se puso en contacto con los fiscales hace aproximadamente una semana, después de aparentemente viajar de Honduras a Nueva York. La decisión del juez sobre la admisión del testigo de última hora está pendiente.
Se espera que el juicio dure un poco más de una semana. Un veredicto de culpabilidad condenaría a Fuentes, de 51 años, a un mínimo de 40 años de prisión y ratificaría las acusaciones contra Hernández en el caso, complicando aún más las relaciones con Estados Unidos.
Promesas de protección
En reuniones secretas con el presidente en 2013 y 2014, el fiscal dijo que Fuentes y Hernández «conspiraron para enviar toda la cocaína posible a Estados Unidos.» Gutwillig continuó alegando que Fuentes pagó a Hernández 25,000 dólares y el presidente prometió proporcionar protección policial y militar para el laboratorio y «protegerlo de la persecución».
“Vamos a meter la droga en las narices de los gringos”, supuestamente le dijo Hernández a Fuentes durante una de las dos reuniones entre ellos que están mencionadas en documentos legales en el caso. Fuentes también dio «acceso» al presidente a su laboratorio de drogas.
Fuentes portaba una subametralladora verde, regalo de un poderoso general hondureño que Gutwillig describió como «el símbolo perfecto de la violencia y la corrupción que alimentaba el negocio de la droga del acusado».
Fuentes presuntamente reportó «directamente a Tony Hernández», hermano del presidente y exlegislador que fue condenado por tráfico de drogas en octubre de 2019. Después de un largo retraso debido a la pandemia, está programado que sea sentenciado el 23 de marzo.
Agentes de la Agencia Antidrogas de EEUU ( DEA) arrestaron a Fuentes el 1 de marzo de 2020 en Miami como parte de la investigación en curso del presidente Hernández y lo que los fiscales llamaron «la alianza impía de funcionarios hondureños y narcotraficantes».
Fotos de armas
Este martes, el primer testigo del gobierno, el agente de la DEA Brian Fairbanks, describió cómo, tras su detención, se encontraron fotos de armas de todo tipo en los móviles de Fuentes y en el iCloud de su hijo. También encontraron entre los contactos telefónicos de Fuentes el número de teléfono y el correo electrónico del presidente Hernández. El número fue corroborado por una solicitud de visado para Estados Unidos de Hernández en 2011.
Entre muchas fotos encontraron imágenes de Cristian Fuentes, hermano de Geovanny Fuentes, con el presidente Hernández. Una foto mostrada al jurado muestra a Cristian Fuentes asistiendo a la fiesta de cumpleaños de Hernández en 2017. Otra foto mostraba a Hernández con los hijos de Fuentes, hace algunos años. En su declaración de apertura, el abogado de Fuentes admitió que Fuentes y Hernández se conocían y fueron presentados por un prominente empresario hondureño, Fuad Jarufe.
El asediado presidente ha negado todas las acusaciones de vínculos con narcotraficantes, afirmando en un reciente discurso ante el Congreso que los narcotraficantes han encontrado una “llave mágica” para reducir sus sentencias declarando mentiras en su contra. El discurso fue en respuesta a un proyecto de ley presentado por senadores estadounidenses que sancionaría a Hernández por presunta corrupción y narcotráfico.