l desplome de la economía venezolana alcanzó 18% en el año 2018 y de lejos es el peor desempeño entre todos los países del mundo, según los datos recabados en este informe.
En el año 2016 el PIB de Venezuela (suma total de riqueza en forma de bienes y servicios que genera un país) cayó 16,5% respecto al año anterior, y en 2017 otro 14,5%.
Solamente en los tres últimos años del gobierno constitucional de Nicolás Maduro, el país ha visto fulminarse y desaparecer la mitad del tamaño de su economía.
Estas cifras confirman observaciones de analistas de que Venezuela muestra el peor desempeño en la historia moderna para un país en tiempos de paz y sin grandes desastres naturales.
El informe no presenta análisis particulares sobre el caso de Venezuela, pero si advierte que una mayor emigración desde este país “también podría tener un impacto negativo en el resto de la región”.
“En 2018, el crecimiento en la región de América Latina y el Caribe se estancó en un nivel bajo, del 0,6 %, como consecuencia del debilitamiento del comercio mundial y el endurecimiento de las condiciones de financiamiento externas. Distintos acontecimientos registrados en Brasil, Argentina y Venezuela limitaron el crecimiento regional. El ritmo de crecimiento se moderó en América Central, mientras que en casi todas las economías del Caribe se vio fortalecido por el contexto de medidas de reconstrucción posteriores a la grave temporada de huracanes de 2017″, señala el informe en su capítulo regional.
“Un repunte en el segundo semestre dio lugar en Brasil a una ligera aceleración del crecimiento en 2018, que se calcula alcanzó el 1,2 %. En Argentina, la crisis cambiaria, la consiguiente aplicación de políticas más restrictivas en materia monetaria y fiscal, y una grave sequía ocasionaron una contracción de alrededor del 2,8 %”.
“En 2018, el ritmo de crecimiento de Chile y Perú se aceleró hasta alcanzar una tasa aproximada del 3,9 %, debido en parte a efectos de base favorables. En el mismo año, el aumento de los precios del petróleo contribuyó al repunte del crecimiento en Colombia, que ascendió al 2,7 %, aunque limitó el crecimiento en América Central”.
“En casi todas las economías de la región que tienen tipos de cambio flexibles —en particular Argentina, Brasil, Chile y Uruguay— se registró una depreciación nominal frente al dólar estadounidense”.
“Las proyecciones indican que este año se producirá un repunte del crecimiento regional —a un ritmo del 1,7 %— respaldado principalmente por el consumo privado. Se prevé que las inversiones aumentarán, pero la desaceleración del comercio mundial limitará el crecimiento de las exportaciones. Las previsiones indican que en Brasil se registrará una expansión del 2,2 %, en el supuesto de que las reformas fiscales se apliquen rápidamente, y que la recuperación del consumo y la inversión compensará con cierto margen los recortes del gasto público.
A pesar de la disminución de la incertidumbre en materia comercial tras el anuncio del acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá, se prevé que el crecimiento en México se mantendrá en un nivel moderado, del 2,2 %, a raíz de la incertidumbre en torno a las políticas que impera en el país. Según las previsiones, en Argentina se producirá una contracción del 1,7 %, a medida que la profunda consolidación fiscal genere pérdida de empleo y un menor nivel de consumo e inversión.
Se prevé que la actividad en Colombia se acelerará a un ritmo del 3,3 %. En Chile, se espera un crecimiento moderado, del 3,5 %. Las estimaciones indican que la expansión de Perú disminuirá al 3,8 %. Se prevé que, a partir de 2020, el producto interno bruto (PIB) per cápita se acelerará y aumentará a un ritmo mayor que el crecimiento per cápita en las economías avanzadas, tras sufrir un estancamiento convergente durante seis años.
ALD/ElEstimulo