El gigante de las telecomunicaciones Ericsson, había admitido previamente haber participado en sobornos y otras conductas indebidas en Djibouti y otros países en un acuerdo estadounidense, y enfrenta por separado múltiples investigaciones por presunta corrupción en Irak.
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Cuatro exejecutivos de Ericsson fueron absueltos hoy en Suecia de los cargos de sobornar a funcionarios de alto rango de Djibouti para ganar un contrato 3G valorado en casi 20 millones de dólares.
Los fiscales acusaron a los ejecutivos de telecomunicaciones de transferir casi $2 millones a través de una firma consultora al presidente de Djibouti, al canciller de justicia y al director ejecutivo de un operador móvil estatal hace más de una década. Pero el Tribunal de Distrito de Solna dictaminó que los fiscales no probaron que el dinero fuera recibido por esas tres personas, según el diario sueco Dagens Nyheter. Los cuatro ex empleados de Ericsson negaron haber actuado mal.
El fiscal Mats Jansson dijo a DN que revisará el veredicto para ver si hay motivos para apelar.
Uno de los cuatro exejecutivos de Ericsson está siendo procesado en los EE. UU. por el presunto plan, acusado de organizar más de $ 2 millones en sobornos a tres funcionarios para vencer a Huawei en la competencia por un contrato en Djibouti.
Ericsson había admitido previamente haber participado en sobornos y otras conductas indebidas en Djibouti, China, Vietnam, Indonesia y Kuwait entre 2000 y 2016 en un acuerdo de corrupción de miles de millones de dólares con el Departamento de Justicia de EE. UU. El acuerdo de enjuiciamiento diferido de 2019 fue uno de los acuerdos de corrupción extranjera más grandes de la historia.
En febrero, la Lista Ericsson , una investigación dirigida por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, reveló que en el mismo año, la empresa había investigado internamente supuestas prácticas corruptas en otros 14 países.
Los registros filtrados mostraron que la compañía había pagado decenas de millones de dólares en pagos sospechosos entre 2011 y 2019 para mantener su negocio en Irak, incluidos pagos para contrabandear equipos a través del territorio controlado por ISIS en una ruta conocida como “Speedway”.
La investigación ha provocado una serie de consecuencias legales y financieras internacionales para el gigante de las telecomunicaciones este año. Ericsson ahora enfrenta investigaciones sobre su conducta en Irak por parte del Departamento de Justicia de EE. UU. , la Comisión de Bolsa y Valores de EE . UU . y las autoridades anticorrupción de Suecia .
La compañía ha dicho que está cooperando con las investigaciones y es probable que enfrente nuevas multas de EE . UU.
