El Ejército de Liberación Nacional (ELN) es el principal grupo guerrillero colombiano y la principal amenaza criminal en la frontera con Venezuela. Gracias a su expansión en ese país, el ELN también se ha convertido una de las principales organizaciones criminales en Venezuela.
antilavadodedinero / InSightCrime
El ELN nació como una guerrilla marxista-leninista, enfocada en el secuestro, la extorsión, y los ataques contra la infraestructura petrolera en Colombia. Desde los ochenta, la guerrilla ha tenido presencia en Venezuela, en un principio usando el país como refugio y retaguardia, pero actualmente manejando parte de la minería ilegal, el narcotráfico y la extorsión.
Militarmente, ELN estaría conformado por más de cinco mil integrantes, distribuidos entre cuatro mil miembros armados y una red de miliciano de al menos mil personas. En Venezuela habrían más de mil integrantes.
Historia
El ELN surgió en los años sesenta, cuando Colombia estaba saliendo de un sangriento periodo de enfrentamientos conocido como La Violencia, y mientras movimientos religiosos y estudiantiles, algunos inspirados en la revolución cubana, ganaban fuerza en el país.
Los segmentos más radicales de estos movimientos se convirtieron en el corazón del grupo guerrillero desde julio de 1964, cuando la pequeña insurgencia armada comenzó a entrenar en San Vicente de Chucurí, en el departamento de Santander, al nororiente de Colombia.
Seis meses después, el 7 de enero de 1965, los rebeldes invadieron Simacota, un pequeño municipio en Santander, anunciando oficialmente su presencia bajo la comandancia de Fabio Vásquez Castaño.
Luego de algunos años de relativa tranquilidad, el ejército de Colombia realizó una ofensiva contra el ELN en el departamento de Antioquia, la cual casi diezmó su cúpula y obligó a la guerrilla a replegarse en el departamento de Arauca, al oriente de Colombia en la frontera con Venezuela. Allí una de las unidades más emblemáticas, el Frente Domingo Laín, se convertiría en una pieza clave en el futuro de la guerrilla.
El ELN comenzó a utilizar Venezuela como refugio de los operativos de las autoridades colombianas desde los ochenta, lo que convirtió el estado fronterizo de Apure en la retaguardia de la guerrilla.
Pero en un inicio, los gobiernos venezolanos eran hostiles a la presencia del ELN, en particular después de la masacre de Cararabo en 1995, cuando ocho infantes de marina fueron asesinados por la guerrilla en el estado Apure. Incluso, en 1998, el gobierno venezolano autorizó a Colombia a entrar en su territorio y perseguir a guerrilleros que se habían refugiado allí después de un ataque.
Sin embargo, la llegada a la presidencia de Hugo Chávez en 1999 significó un cambió hacía una actitud amistosa con el ELN y con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la guerrilla más importante en ese país.
Eso se combinó con la creciente presión de las fuerzas de seguridad colombiana, los ataques de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y una relación ambivalente con las FARC, lo que llevó a que el ELN empezara a moverse con más frecuencia dentro de Venezuela.
Pero en 2016 las FARC firmaron un acuerdo de paz con el Gobierno de Colombia y salieron del panorama criminal, lo que se convirtió en una oportunidad para que el ELN empezara a luchar por el control de la frontera colombo-venezolana en zonas como Norte de Santander – Táchira y Arauca – Apuré.
El control sobre secciones de la frontera no solo les permitió manejar rutas para el narcotráfico entre ambos países, sino que garantizó una ruta para movilizar tropas entre Colombia y Venezuela, lo que les permitía huir de los operativos de las autoridades colombianas con rapidez y preparar ataques desde Venezuela.
Así, el ELN usa estados como Apure para que sus combatientes y líderes como Gustavo Aníbal Giraldo, alias “Pablito”, se escondan y lideren negocios ilegales como el tráfico de drogas y el contrabando de gasolina.
Actualmente, la guerrilla ejerce un fuerte control social en zonas de ese estado, actuando como un poder de facto, resolviendo controversias entre los ciudadanos y manteniendo un tipo de orden criminal.
Otro líder del ELN, Jaime Galvis Rivera, alias “Ariel”, también se estaría escondiendo en territorio venezolano. Este comandante, del cual poco se sabe, habría ganado tanta fuerza en los últimos años que comandaría segmentos del ELN en Colombia junto con Pablito.
Pero la presencia del ELN en Venezuela va más allá de los Estados fronterizos. InSight Crime ha podido confirmar que la guerrilla está en al menos 8 de los 24 estados, algunos tan alejados como Anzoátegui, al oriente del país cerca al Mar Caribe.
Esta presencia le ha permitido al grupo crear emisoras clandestinas, controlar la distribución de comida, especialmente a través de las cajas de alimentos proporcionadas por el Estado conocidas como los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), incursionar en la minería ilegal y controlar zonas de producción de cocaína.
Por esta razón, el ELN se ha convertido en una guerrilla binacional, la cual, aunque actúa de manera distinta en ambos países, es uno de los grupos criminales más importante en Sur América.
Liderazgo
El ELN tiene una estructura federada, en la cual los frentes guerrilleros actúan con relativa independencia de la influencia del Comando Central, principal estructura de representación de la guerrilla, lo que le entrega un alto grado de autonomía y poder a los comandantes de los ocho Frentes de Guerra en Colombia y Venezuela.
Los lideres más importantes del ELN actualmente son: Eliecer Erlinto Chamarro, alias “Antonio García”, actual jefe de la guerrilla y quien se ha rumoreado que estaría escondido en Venezuela desde 2010.
Otro importante líder del ELN, Israel Ramírez Pineda, alias “Pablo Beltrán”, segundo al mando y representante frente a las conversaciones de paz con el gobierno de Colombia en Cuba, ha viajado a Venezuela para discutir con Pablito y Antonio García el futuro de las conversaciones de paz.
Se dice que el líder natural del Frente de Guerra Oriental, Pablito, se esconde en Apure, Venezuela. Hoy en día es uno de los comandantes con mayor relevancia dentro del ELN y con mucha ascendencia en el Comando Central. Desde 2018 Pablito es requerido por la Interpol a través de una circular roja por varios delitos.
Otro líder de la guerrilla del que poco se sabe Jaime Galvis Rivera, alias “Ariel”, también estaría escondido en Venezuela, desde donde tiene mucha influencia en las acciones del ELN.
Geografía
La presencia del ELN en Venezuela no ha dejado de crecer en los últimos años. información recopilada por InSight Crime confirma que la guerrilla colombiana está en 8 de los 24 estados de Venezuela, donde se reparten la presencia en más de 40 municipios.
Los estados donde el ELN tiene mayor presencia son Zulia, Táchira, Apure y Amazonas. En los cuatro la guerrilla se asentó en municipios fronterizos que les permite controlar economías criminales y garantizar la movilidad entre Colombia y Venezuela.
El ELN también ha extendido su presencia a estados en el centro y este de Venezuela, como Bolívar, Anzoátegui y Guárico.
Aliados y enemigos
Las alianzas más importantes del ELN en Venezuela son con segmentos de las autoridades de ese país, las cuales le permiten actuar con cierta libertad en su territorio. Esto se ve aún más en los estados fronterizos con Colombia, donde la guerrilla se relaciona con agentes de las fuerzas de seguridad y los gobiernos locales; aunque estas relaciones, al estar mediadas especialmente por el beneficio mutuo, podrían no ser tan estables.
En la criminalidad, el ELN se ha aliado con las Fuerzas Bolivarianas de Liberación (FBL), también conocido como “Los Boliches”, una guerrilla venezolana; aunque debido al conflicto del ELN con las disidencias FARC en Apure, donde el FBL tiene presencia, no es claro si esa alianza se mantiene.
Otros aliados del ELN han sido los grupos narcotraficantes brasileros Comando Rojo (Comando Vermelho) y la Familia del Norte (Familia do Norte). Así como el Cartel de Sinaloa, de México.
Detalles de la posible alianza entre el ELN y el Gobierno de Venezuela fueron revelados por el entonces comandante y líder de las conversaciones de paz del ELN Pablo Beltrán, quien explicó que han tenido enemigos en común con el Gobierno de Maduro.
Mientras tanto, un aliado inesperado del ELN son las ex-FARC “Segunda Marquetalia”, liderada por Luciano Marín Arango, alias “Iván Márquez”. Desde 2021 altos mandos de ambos grupos empezaron a reunirse en Venezuela para discutir la expansión criminal a lo largo de America Latina.
Por otro lado, los enemigos principales del ELN han sido otros segmentos de las ex-FARC Mafia en Apure y Arauca, como el Frente 10. A través de un comunicado conocido a principios del 2022 este grupo le declaró la guerra al ELN. El conflicto se ha sentido a lo largo de ese año en ambos lados de la frontera entre Colombia y Venezuela.
Perspectivas
Actualmente el ELN está en una encrucijada entre la paz y la continuación de la guerra.
El Gobierno de Colombia y la guerrilla anunciaron el retorno a las conversaciones de paz en octubre, luego de que un ataque con carro bomba del ELN en Bogotá en 2019 acabara con el ciclo anterior.
En este nuevo impulso de los diálogos de paz, el Presidente Maduro aceptó ser garante de las conversaciones, en lo que parece una admisión de que, sin el papel de Venezuela, el ELN nunca dejaría las armas.
Sin embargo, no es claro qué incentivos reales tiene el ELN en Venezuela para desarmarse.
Allí la guerrilla controla partes de la minería ilegal, el contrabando y el narcotráfico lo que le dan dinero suficiente para seguir en la criminalidad sin depender de la guerrilla en Colombia. Además, mientras las relaciones del ELN con agentes del estado venezolano se mantenga, pueden actuar con confianza en el país.
A esto, se le suma la importancia del ELN para el Gobierno de Venezuela, especialmente cuando desean combatir estos “enemigos comunes” que mencionaba Pablo Beltrán; lo que pondría a la guerrilla en un estamento más alto que los otros grupos ilegales en el país.
Así, incluso si las conversaciones de paz con el gobierno colombiano son fructíferas, no es claro si el ELN entregaría las armas y regresaría a Colombia.
En definitiva, la perspectiva para el ELN en Venezuela es seguir delinquiendo, continuar enriqueciéndose del narcotráfico y la minería ilegal, persistir en el control de segmentos de la frontera con Colombia y proseguir con su transformación en uno de los grupos criminales más poderosos en Suramérica.