El rastro del dinero. Al retornar al país, Marcos Estrada Gonzales usó a miembros de su familia y a sus amigos como testaferros para compra de inmuebles, vehículos y otros bienes con el dinero obtenido de la venta de la droga. Desde que llegó, la policía lo vigilaba.
El 6 de noviembre del 2020, el escurridizo peruano Marcos Estrada Gonzales recibió una condena de 24 años de prisión por haber encabezado una organización criminal en Buenos Aires, Argentina, que a sangre controló la venta al menudeo de droga, entre 2002 y 2016. Seis años después, las autoridades argentinas lo expulsaron y devolvieron al Perú, y quedó libre.
Marcos Estrada entonces reinició su vida desde que regresó a Lima, el 22 de junio del 2022. Con las ganancias que había obtenido del narcotráfico, comenzó a comprar inmuebles, vehículos de lujo e hizo viajes de placer al exterior. También alquiló un departamento en la calle Loma Umbrosa, en la zona residencial de Santiago de Surco.
El capo del narcotráfico, que desde su centro de operaciones en la Villa 1-11-14, en la capital argentina, amasó fortuna con la venta de droga, no sabía que los agentes de la Dirección de Investigación de Lavado de Activos (Dirila) lo estaba vigilando. A él y a una red de familiares y amigos que obraban como testaferros de las adquisiciones que hacía con dinero del narcotráfico.
Nacido en Lima el 2 de abril de 1963, Marcos Estrada fue detenido el martes en su lujoso departamento de Loma Umbrosa por agentes de la Dirila. Fue sorprendido en pijama.
El operativo de captura y allanamiento fue ordenado por el titular del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria, magistrado Richard Concepción Carhuancho, a solicitud de la fiscal de Lavado de Activos, Luz Taquire, por el delito de conversión y ocultamiento proveniente del narcotráfico.
Simultáneamente, en el distrito de San Juan de Lurigancho, fueron arrestados sus sobrinos Jonathan y Johana Estrada Reyes, hijos de Fernando Estrada Gonzales, quien cumple prisión por narcotráfico en Buenos Aires.
La medida judicial también alcanzó a Osmar Caramantín Cornejo, Julio Palacios Zegarra, Pablo Miranda Oré y Carlos Navarro Córdova, sindicados como testaferros de la organización criminal liderada por Marcos Estrada Gonzales.
La fiscal del caso argumentó que Marcos Estrada, desde que llegó a suelo peruano, hizo una serie de viajes a Paraguay, Argentina, Chile y Bolivia sin contar ni acreditar alguna actividad laboral.
Los agentes de Inteligencia de la Dirila detectaron que Marcos Estrada se desplazaba en una camioneta Honda de placa B4A-449. El vehículo está a nombre de José Centeno García, quien lo adquirió a 12.000 soles el 22 de enero del 2020, cuyo precio es inferior al valor del mercado, pues la anterior propietaria pagó 10.000 dólares.
Lo que llamó la atención a la fiscal Luz Taquire es que José Centeno tiene como domicilio la manzana A, lote 6 del asentamiento humano Tres Compuertas, Caja de Agua, en San Juan de Lurigancho, inmueble de propiedad de sus sobrinos Johana y Jonathan Estrada Reyes, hijos de su hermano Fernando Estrada Gonzales, preso en Argentina.
Según la Fiscalía, Johana y Jonathan Estrada Reyes actuaron como testaferros de Fernando Estrada Gonzales, su padre. Ambos registran 40 transferencias de dinero de miles de dólares desde la Argentina a través de testaferros y con dinero producto del narcotráfico adquirieron inmuebles y vehículos.
La Dirila requirió a varias empresas que se dedican a la transferencia de dinero desde Argentina hacia Perú los movimientos a nombre de Marcos Estrada, familiares y cómplices, y corroboró que incluso encontrándose preso en Buenos Aires despachó importantes cantidades de dinero.
En la resolución del juez Richard Concepción Carhuancho ordenando la detención de la organización de Estrada, se consignan las declaraciones de varios de los implicados, quienes confirmaban que simularon ser los propietarios de inmuebles y vehículos que habían adquirido con fondos del narcotraficante Marcos Estrada.
Los agentes de la Dirila también registraron en video los desplazamientos de Marcos Estrada Gonzales gozando de un estilo de vida que no corresponde con una persona que no cuenta con trabajo. Es probable que la Fiscalía solicite prisión preventiva por los antecedentes de Estrada.
Estrada escapó por acusación de terrorismo
En los años 90, Marcos Estrada Gonzales fue denunciado por pertenecer a Sendero Luminoso y participar en actividades terroristas. Fue incluido en varias órdenes de captura, pero huyó hacia Buenos Aires.
Estrada se instaló en la Villa 1-11-14, donde se encontró con otros exsenderistas, los hermanos Alionzo y Esidio Ramos Mariños, con quienes se inició en el narcotráfico.
Estrada declaró a la policía: “Tuve una detención del 2002 al 2004 por el delito de drogas. La segunda vez fue en noviembre del 2007, me detuvieron en Paraguay, también por el delito de droga. Me extraditaron y salí en febrero del 2014. La tercera vez fue de diciembre del 2016 al 2022 por el delito de drogas”.
Los detenidos
- Marco Estrada Gonzales.
- Johana Estrada Reyes.
- Jonathan Estrada Reyes.
- Pablo Miranda Oré.
- Carlos Navarro Córdova.
- Osmar Caramantín Cornejo.
- Julio Palacios Zegarra.