El Commonwealth Bank of Australia (CBA) ha dado pasos importantes en su lucha contra el fraude y los errores financieros con su tecnología NameCheck.
Bendigo Bank tiene previsto incorporar esta tecnología a su aplicación bancaria Up, mientras que Satori, una empresa de supervisión de fraudes, también va a poner a prueba el sistema dentro de sus estructuras de control financiero.
Desde su lanzamiento en marzo de 2023, NameCheck ha evitado con éxito más de 10.000 intentos de estafa, ahorrando a los clientes de CBA aproximadamente 38 millones de dólares. Además, la tecnología ha reducido significativamente los pagos erróneos en más de 100 millones de dólares. Se espera que la integración de NameCheck en la aplicación Up se complete a principios de 2024, mejorando las medidas de seguridad para los clientes de Bendigo Bank.
En respuesta a la creciente amenaza de la ciberdelincuencia, la CBA ha recomendado a las empresas un sencillo protocolo de tres pasos: Detener. Detener. Rechazar, que subraya la importancia de la vigilancia en las transacciones financieras. Estudios recientes han puesto de relieve que el 20% de las empresas australianas carecen de defensas adecuadas contra las estafas, lo que plantea la necesidad de mejorar el escrutinio de los documentos financieros, las actualizaciones de software y los programas de formación del personal.
El mes pasado, la CBA colaboró con Telstra para introducir la herramienta Scam Indicator, que protege aún más a los consumidores de las estafas telefónicas. Además, CBA anunció planes para extender NameCheck a casi todas las transacciones a través de CommBiz, su plataforma de banca empresarial. Esta medida está en consonancia con el compromiso de CBA de salvaguardar la integridad financiera y pone de relieve los continuos esfuerzos del banco por mejorar la eficiencia operativa y la prevención del fraude mediante controles financieros basados en la IA.
El ejecutivo de CBA Mike Vacy-Lyle ha pedido un enfoque unido para aprovechar soluciones avanzadas como NameCheck para abordar eficazmente el aumento de las actividades de ciberdelincuencia. Esta iniciativa refleja una tendencia más amplia de la industria hacia la adopción de medidas de seguridad más robustas para proteger a los consumidores y las empresas de las amenazas financieras.