Las autoridades neoyorquinas decomisaron casi 40 libras de narcóticos de un apartamento de lujo en Hell’s Kitchen, Manhattan, en una redada que evitó que más de $1,1 millones de dólares en cocaína y metanfetamina se vendieran en las calles de Nueva York.
El Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) detuvo a Jovanny Salas, de 29 años, y Sergio Peralta, de 34, el 12 de marzo, y enfrentan cargos de posesión criminal de una sustancia controlada en primer, segundo y tercer grado.
Ambos sujetos aparentemente tienen vínculos con México, dicen sus documentos de identificación.
Las capturas se produjeron tras las averiguaciones de varias agencias sobre el tráfico de drogas en la ciudad, que incluyó al NYPD, la Policía del Estado de Nueva York y la Administración de Control de Drogas (DEA).
Las labores conjuntas llevaron a los detectives al 550 W. 54th Street, un edificio residencial de lujo donde se recuperaron los narcóticos. Los apartamentos de ese edificio oscilan entre los $3,84 5 por un estudio hasta $8,150 por una residencia de dos habitaciones y dos baños, informó StreetEasy.
Los oficiales vieron a Salas saliendo del apartamento cerca de las 5:47 de la tarde del martes. Tomó el ascensor hasta el vestíbulo, donde fue arrestado.
Al revisarle sus pertenencias hallaron una billetera que tenía la identificación de Peralta y una llave que presuntamente abrió la puerta del apartamento 27F, señalaron los funcionarios.
A eso de las 5:55 de la tarde, los integrantes del Grupo de Trabajo Antidrogas de Nueva York (NYDETF) entraron al apartamento para hacer una búsqueda autorizada por la corte, donde descubrieron y detuvieron al Peralta.
Los detectives recabaron cerca de 30 libras de metanfetamina y más de 8 libras de cocaína guardadas en una maleta dentro del armario de una habitación.
Asimismo, se halló una mochila con unos $27,880 en efectivo, informó New York Post.
Las autoridades también confiscaron el pasaporte mexicano de Peralta y su visa/tarjeta de cruce fronterizo estadounidense vencida, así como el registro de votante mexicano de Salas, su licencia de conducir de Colorado y su pasaporte estadounidense.
“Los cargos derivados de este caso demuestran el compromiso inquebrantable de la policía de Nueva York, la DEA y todos nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley de investigar a fondo a cualquier persona presuntamente involucrada en el tráfico ilícito de drogas en la ciudad de Nueva York”, explicó el comisionado de la policía de Nueva York, Edward A. Caban.
“Estos arrestos envían un mensaje claro de que continuaremos siendo implacables en la incautación de sustancias venenosas antes de que se distribuyan en nuestros vecindarios”.
En ese sentido, el superintendente interino de la Policía Estatal de Nueva York, Steven G. James, flageló duramente con sus palabras a los sospechosos por sus presuntas actividades, que, de acuerdo con él, ponían en peligro a toda la comunidad.
“Estos individuos no tenían en cuenta los peligros que ellos, o esta operación, traían a esta comunidad”, señaló James en un comunicado.
“Los cargos de hoy son el resultado de una estrategia agresiva para detener las operaciones de drogas ilegales y mantener las sustancias mortales fuera de nuestras calles”.
Peralta y Salas fueron procesados en el Tribunal Penal de Manhattan el pasado miércoles en la noche. Los dos sujetos están tras las rejas en Rikers Island con una fianza de $75,000 dólares o una fianza de $100,000 dólares.
La siguiente comparecencia ante la corte será el 18 de marzo.
