(Matías Nahón, Consultor y referente en investigación y prevención de fraude corporativo, autor del libro “El fraude en la era digital” habla sobre el dinámico escenario económico de Argentina, el fraude y los ciberataques constituyen una amenaza persistente que vulnera la confianza, reduce la inversión y desacelera el crecimiento de las empresas.
Sin embargo, el surgimiento de la revolución tecnológica, liderada por la inteligencia artificial (IA), está redefiniendo la batalla contra esta problemática.
Aquí presentamos las 5 soluciones que aporta la IA para ser aliada fundamental para prevenir e investigar fraudes, transformando no solo las estrategias corporativas sino también fortaleciendo los sistemas judiciales.
- La IA como aliada para vencer al fraude. La IA, con su capacidad para procesar y analizar grandes volúmenes de datos a velocidades y con una precisión inalcanzables para el humano, presenta una oportunidad sin precedentes para combatir el fraude. En Argentina, donde los recursos son a menudo limitados, la Justicia puede verse desbordada por la complejidad y el volumen de casos, la implementación de herramientas de IA podría ser un avance de características inimaginables.
- Ayuda en la detección temprana y prevención. La implementación de sistemas de IA en el ámbito empresarial está revolucionando la manera en que las organizaciones abordan la prevención del fraude. A través del análisis de patrones y la identificación de comportamientos anómalos, estas herramientas pueden detectar riesgos de fraude antes de que ocurran. En el sector bancario, por ejemplo, la IA está siendo utilizada para monitorear transacciones en tiempo real, identificando actividades sospechosas que podrían indicar intentos de fraude o lavado de dinero. Esta capacidad para anticiparse a los actos fraudulentos permite a las empresas y entidades financieras tomar medidas correctivas de manera inmediata, salvaguardando así sus activos y la confianza de sus clientes.
- Es clave en la investigación y análisis. Más allá de la prevención, la IA también está transformando la manera en que se investigan los fraudes una vez que han sido detectados. Al poder procesar cantidades masivas de información, desde transacciones financieras hasta comunicaciones electrónicas, la IA puede identificar conexiones y patrones que serían casi imposibles de discernir para los investigadores humanos. En el contexto argentino, donde los sistemas judiciales enfrentan desafíos como la corrupción y la falta de recursos, la IA ofrece una herramienta poderosa para hacer frente a estas limitaciones, proporcionando evidencia sólida y objetiva que puede fortalecer los casos contra los perpetradores de fraudes.
- No hay reglamentación aún en el marco regulatorio. La implementación de la IA en la lucha contra el fraude no está exenta de desafíos. Uno de los más significativos es la necesidad de equilibrar la eficacia de estas herramientas con el resguardo de la privacidad y los derechos individuales. En este sentido, es fundamental que tanto empresas como gobiernos trabajen en desarrollar marcos regulatorios que permitan el uso de la IA de manera ética y responsable.
- Es efectiva por la calidad y la cantidad de los datos con los que se alimenta. Esto plantea un reto particular en nuestro país, donde la infraestructura de datos puede ser inconsistente y la recolección de datos enfrenta obstáculos tanto técnicos como culturales. Para superar estos desafíos, es esencial fomentar la colaboración entre el sector público y privado, así como invertir en la mejora de las infraestructuras de datos y en la capacitación de profesionales en el campo de la IA.
En conclusión, la IA representa una promesa y un desafío para Argentina en su lucha contra los ciberataques y el fraude. Al abordar estas tecnologías con un enfoque ético y colaborativo, nuestro país, no solo puede protegerse contra las amenazas actuales, sino también construir un camino hacia un futuro más seguro y eficiente en materia de prevención e investigación de fraudes corporativos.
