En vísperas del tercer aniversario de la creación de la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha (JTFA), el Departamento de Justicia ha anunciado hoy esfuerzos adicionales para desmantelar las operaciones de contrabando de personas y aumentar la responsabilidad de aquellos que violen nuestras leyes de inmigración. Iniciada en junio de 2021 por el fiscal general Merrick B. Garland y el secretario de Seguridad Nacional Alejandro N. Mayorkas, la JTFA representa una asociación entre el Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) con el mandato de perturbar y desmantelar las organizaciones de tráfico y trata de personas que operan en Guatemala, Honduras, El Salvador y México y a través de estos países.
Para aprovechar el éxito de la JTFA, incluido un aumento de más del 25 % de la cantidad de acusados de contrabando de extranjeros desde 2020, el Departamento de Justicia está reajustando los recursos, proporcionando incentivos financieros y proponiendo penas más graves para los delitos de contrabando o tráfico de personas.
El Departamento de Justicia también está coordinando con los fiscales federales fronterizos y sus distritos, así como con el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y otros organismos encargados de hacer cumplir la ley, para evaluar las necesidades actuales y la asignación de recursos, e identificar las oportunidades disponibles y potencialmente nuevas para abordar las cuestiones de inmigración.
Otorgar prioridad a los enjuiciamientos en los que haya contrabandistas implicados
El Departamento de Justicia seguirá dando prioridad a la persecución de los casos relacionados con el tráfico ilícito de seres humanos, trabajando a través de la JTFA, dirigida por la Sección de Derechos Humanos y Procesos Especiales (HRSP) de la División Penal del Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ), y de los esfuerzos de las distintas fiscalías de Estados Unidos y sus asociados encargados de hacer cumplir la ley.
Los enjuiciamientos por delitos graves de tráfico han seguido una trayectoria ascendente, aumentando un 27 % desde el año 2020. Estos casos son significativos. Incluyen el contrabando de personas tanto de poblaciones vulnerables como de individuos que plantean problemas de seguridad, así como el transporte ilegal de activos y contrabando, la huida a alta velocidad de las fuerzas del orden y la posesión de armas de fuego por parte de los acusados de contrabando. Centrarse en la persecución de delitos graves de contrabando tiene un efecto disuasorio, que no sólo afecta al acusado, sino que crea un efecto dominó que desalienta el contrabando en el futuro. Los enjuiciamientos adicionales por tráfico se centrarán en rutas conocidas utilizadas y controladas por cárteles y otros grupos delictivos organizados.
La JTFA continuará centrándose en los contrabandistas de personas de más alto nivel, los peores de lo peor. Desde su creación en junio de 2021, la JTFA ha logrado resultados tangibles importantes, entre ellos:
- Más de 300 arrestos, incluyendo a dirigentes, organizadores y facilitadores importantes;
- Más de 240 condenas en Estados Unidos;
- Más de 170 acusados de Estados Unidos sentenciados, con condenas importantes de 30 años de prisión o más;
- Decomisos e incautaciones de activos importantes así como contrabando que incluye millones de dólares en efectivo, propiedades inmuebles, vehículos, armas de fuego y municiones, drogas; y
- Múltiples acusaciones y solicitudes de extradición exitosas contra objetivos de dirigentes extranjeros localizados en Guatemala, México y Honduras.
Justo esta semana la dirigente de una organización de contrabando de migrantes fue sentenciada (en inglés) a 10 años de prisión por su papel en el contrabando con fin de lucro de más de cien (100) migrantes de Honduras a Estados Unidos.
Utilizar recompensas económicas para desmantelar el liderazgo de las redes de contrabando transnacional de personas
El Departamento de Justicia y el Departamento de Estado están poniendo en marcha la iniciativa ASR (Anti-Smuggling Rewards) de recompensas contra el contrabando diseñada para desmantelar el liderazgo de las organizaciones de tráfico ilícito de personas que traen migrantes a través de América Central y de la frontera sur de Estados Unidos. La iniciativa ASR hará uso de la autoridad legal existente, por medio del Programa de recompensas contra la delincuencia organizada transnacional del Departamento de Estado, para ofrecer recompensas económicas por información que conduzca a la identificación, localización, arresto o condena de los principales responsables de actividades importantes de tráfico de personas en la región.
La iniciativa ASR estará dirigida a categorías de alta prioridad de contrabando de personas, tales como:
- Dirigentes de ciertos cárteles identificados y otras organizaciones transnacionales responsables del contrabando de personas en el Hemisferio Occidental y a través de la frontera sur de Estados Unidos;
- Dirigentes y organizadores de redes de contrabando de personas responsables de ciertos eventos identificados de fatalidades en masa; y
- Ciertos fugitivos internacionales de alta prioridad identificados que son buscados por ofensas de tráfico de personas.
Además, el Departamento de Justicia ofrecerá la posibilidad de recompensas adicionales para aquellos que proporcionen información que resulte en el decomiso de rendimientos criminales obtenidos de actividades de contrabando de personas. El Departamento del Tesoro, en coordinación con la iniciativa ASR continuará empleando su autoridad para perturbar operaciones de alta prioridad de tráfico de personas.
Aumento de las penas para los traficantes de personas más activos y peligrosos
Al menos desde 2016, el Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) han instado a la Comisión de Sentencias de Estados Unidos a considerar el endurecimiento de las penas para quienes cometan delitos de tráfico de personas. Las actuales directrices para la imposición de penas no tienen plenamente en cuenta la gravedad o el alcance de la mala conducta de los acusados en los casos de contrabando de seres humanos, lo que da lugar a incentivos perversos y reduce la capacidad de los fiscales para perseguir a los dirigentes de las organizaciones de tráfico. A pesar de las renovadas solicitudes del Departamento de Justicia y del DHS tan recientes como del año pasado, la Comisión no ha aumentado significativamente las penas para los contrabandistas de personas más peligrosos.
Por ello, el Departamento de Justicia y el DHS están apoyando a los fiscales en sus esfuerzos por responsabilizar a los individuos acusados del peligroso tráfico de personas, y el Departamento de Justicia tiene la intención de buscar nuevas y mayores penas contra los contrabandistas de personas que tengan debidamente en cuenta la gravedad de su conducta criminal y la miseria humana que causa. La propuesta introduciría tres cambios importantes en la directriz estadounidense sobre penas §2L1.1 (U.S. Sentencing Guideline) que regula los delitos de tráfico de seres humanos:
- Crear categorías de penas más elevadas según la cantidad de personas traficadas por el acusado;
- Aumento de penas en caso de que la conducta de los acusados resulte en lesión o muerte para más de una persona; y
- Asegurar que los acusados sean sujetos a mayores sentencias en caso de asalto sexual y otros tipos de conducta sexual prohibida cometidos durante la ofensa del contrabando, incluso si dicha conducta ocurrió fuera de la jurisdicción de Estados Unidos.
Desplegar recursos del Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional para esfuerzos específicos de aplicación de la ley
El Departamento de Justicia está colaborando con el Departamento de Seguridad Nacional para asignar más fiscales y personal de apoyo a fin de aumentar los procesos federales relacionados con la inmigración en las fiscalías federales fronterizas. Esta asociación operativa crítica se está llevando a cabo a pesar de un presupuesto aprobado para el año fiscal 2024 que incluye la mayor disminución de fondos de un año a otro para las Fiscalías Federales de Estados Unidos en la historia del Departamento de Justicia. Los esfuerzos incluyen el despliegue de más fiscales adjuntos especiales del DHS a las fiscalías fronterizas, la asignación de personal de apoyo destacado a las fiscalías críticas, la búsqueda de fiscales del Departamento de Justicia para prestar servicios en las fiscalías de los distritos fronterizos, y la asociación con agencias federales para identificar recursos adicionales para combatir estos delitos.
Además de aumentar nuevos recursos para los distritos fronterizos, las Fiscalías Federales de Estados Unidos continuarán desplegando los recursos y estrategias existentes dirigidos a los delitos de inmigración.
Sobre la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha (JTFA)
La Sección de Derechos Humanos y Procesos Especiales (HRSP) de la División Penal del Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ) dirige la JTFA en colaboración con las Fiscalías Federales de Estados Unidos y con el apoyo específico de la Oficina de Asuntos Internacionales; la Oficina de Desarrollo, Asistencia y Capacitación Fiscal; la Sección de Estupefacientes y Drogas Peligrosas; la Sección de Lavado de Dinero y Recuperación de Activos; la Oficina de Operaciones de Aplicación de la Ley; y la Sección de Crimen Violento y Delincuencia Organizada. La JTFA también cuenta con una importante inversión policial del DHS, el FBI, la Administración para el Control de Drogas y otros asociados. La JTFA coordina estrechamente con las fuerzas del orden extranjeras las investigaciones transfronterizas, los arrestos de objetivos extranjeros y las extradiciones.