¿Que tienen en común países tan distantes como Venezuela, Bahamas, Irlanda, Marruecos, Dubai y Turquía? Que forman parte de la velada ruta comercial del oro venezolano que salió por el aeropuerto internacional de Maiquetía en 2018 como producto de exportación.
73,2 toneladas de oro fueron vendidas por el Banco Central de Venezuela (BCV) hasta diciembre de 2018 a dos empresas de Emiratos Árabes Unidos (EAU) y una de Turquía, sin la aprobación de la Asamblea Nacional, tal como obliga la Constitución Nacional en su artículo 187.
La denuncia, presentada en febrero de 2019 por el diputado Carlos Paparoni, presidente de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional, recordó que el Ejecutivo no puede celebrar contratos de interés público nacional con Estados o sociedades extranjeras sin el visto bueno del parlamento.
Runrun.es tuvo acceso a una filtración que detalla cómo salió del país el oro del BCV a lo largo de 2018. Los datos fueron contrastados con los rastreos reflejados por Flightradar24.com, una web pública de información en tiempo real sobre el tráfico aéreo alrededor del mundo, que permitió comprobar el trayecto que siguió cada avión así como las referencias de cada vuelo. Algunos de estos traslados se hicieron en aeronaves privadas. Otros, en la aerolínea turca Turkish Airlines, que tiene una ruta turística sin escalas de Caracas a Estambul desde finales de 2016.
En los registros aduanales a los que tuvo acceso Runrun.es, las 73,2 toneladas de lingotes de oro fueron vendidos entre la empresa emiratí Noor Capital (27.396 kilogramos), la turca Sardes Kiymetlí Madenler A.S (23.994 kilogramos) y la belga domiciliada en EAU, Goetz Gold LLC (21.886 kilogramos). 33 cargamentos de lingotes fueron transportados en 27 vuelos de la aerolínea pública Turkish Airlines (Turquía) y cinco de las privadas Copa Airlines (Panamá), Solar Cargo (Venezuela), Rotana Jet Airlines y E-Cargo Airlines (ambas de Emiratos Árabes Unidos). Sólo uno de los 33 vuelos y su respectiva compañía no logró ser identificado.
El total de toneladas de oro exportadas por el BCV en 2018 supera ocho veces las 8,64 toneladas que el organismo oficial registró como producción interna hasta mayo de 2018.
Se desconoce si las 73 toneladas de oro exportadas por Venezuela en 2018 proceden de las reservas del BCV o de la producción no reportada del Arco Minero del Orinoco.
Si bien se ha registrado un desplome de 56 por ciento de las reservas desde que Nicolás Maduro asumió el poder el 2013, a finales del año pasado tuvieron un ligero incremento de 11 toneladas al pasar de 150,216 toneladas de oro en enero a 161,22 toneladas en septiembre de 2018, según datos del Consejo Mundial del Oro. Dentro de esta cifra entrarían las oficiales 8,6 toneladas que ingresaron al BCV como producción interna en 2018.
Negocios con “oro de sangre”
21,8 de las 73,2 toneladas de oro que exportó el BCV en 2018 fueron compradas por Goetz Gold LLC, empresa de origen belga con sede en Dubai, Emiratos Árabes Unidos, y hoy bajo cuestionamiento. Es investigada por organizaciones anticorrupción de Europa y África por formar parte de una red de tráfico de “oro de sangre”, entendido como el metal precioso explotado en zonas conflictivas que financia crímenes, guerras y promueve la violación de derechos humanos.
Goetz Gold LLC forma parte del grupo Tony Goetz https://www.tonygoetz.com/) cuya casa matriz se encuentra en Amberes, Bélgica, conocida internacionalmente como la ciudad de los diamantes.
Goetz Gold está bajo sospecha por formar parte de una red de tráfico ilegal de minerales conflictivos. La empresa exporta a Europa y Estados Unidos toneladas de oro procesado por la compañía African Gold Refinery (AGR) de Uganda, la refinería más grande de África subsahariana, que a su vez pertenece en su totalidad al mismo emporio belga. Parte del material con el que esta fábrica produce los lingotes proviene del contrabando de la República Democrática del Congo (RDC), donde 100 por ciento de la actividad minera es ilegal y sirve como fuente de financiamiento para compra de armamento en un país de alta inestabilidad política, social y económica desde hace décadas.
Los señalamientos se basan en sendas investigaciones: “Lavandería dorada”, publicada en octubre de 2018 por The Sentry, organización anticorrupción con sede en Washington que monitorea los negocios que causan masacres en África, coofundada por el actor estadounidense George Clooney.
Pero el oro que refina la AGR no sólo proviene de sus vecinos de África. Recientemente, la compañía ugandesa admitió que recibe material de América del Sur sin detallar el país de origen. Pero los medios de comunicación oficiales de Uganda asomaron que se trataría de Venezuela, que hoy se vale de las ventas de oro para obtener liquidez ante su colapsada economía y evadir las sanciones de Estados Unidos y Europa. Autoridades policiales de Uganda declararon el 13 de marzo de 2019 que están investigando a la refinería sobre la legalidad de la importación de 7,4 toneladas de oro en marzo de 2019 por un valor de unos US$300 millones.
Esta empresa belga con sede en Kampala, Uganda, bajo investigación por el grupo de Expertos del Consejo de Seguridad de la ONU, fue la misma que compró 21,8 toneladas de oro a Venezuela en 2018, cantidad que representa 30 por ciento del total de las ventas del BCV al exterior del año pasado. Salieron por el aeropuerto de Maiquetía en tres vuelos en diferentes fechas: el cargamento mayor, de 15,6 toneladas, se registró el 3 de diciembre de 2018, después que Estados Unidos anunciara sanciones a todo aquel que hiciera transacciones con el oro venezolano.
El oro adquirido por Goetz Gold fue transportado desde Maiquetía por la aerolínea emiratí Rotana Jet (domiciliada en Abu Dhabi, EAU) y la rusa E-Cargo, con sede en el aeropuerto internacional Domodedovo de Moscú. Ninguna de las dos empresas cubren rutas comerciales en Venezuela.
Runrun.es intentó consultar la versión de Goetz Gold mediante un email dirigido el 14 de febrero de 2019 a su presidente, Alain Goetz, no obtuvo respuesta.
Turquía y el oro que no se refina
En diciembre de 2018 casi 24 toneladas (23.994 kilogramos) de oro venezolano habían salido a Estambul a bordo de 28 vuelos realizados entre enero y septiembre de 2018, de acuerdo con datos de la filtración obtenida por Runrun.es.
Tras salir de Venezuela, ese “oro de sangre” –extraído de yacimientos que son escenarios de masacres y están tomados por bandas criminales que controlan la actividad y asesinan a los trabajadores que muestran algún desacuerdo con ellos– fue destinado a la empresa privada turca Sardes Kiymetlí Madenler A.S, con la que el gobierno de Maduro pactó ventas a través del BCV, según denunció el diputado Carlos Paparoni a inicios de febrero.
Apuntan los documentos obtenidos por Runrun.esque en cada uno de los viajes de oro para Sardes se transportaron entre 226 y 3.721 kilogramos de oro. La mayoría de estos trayectos, 27, se hicieron a través de la aerolínea nacional de Turquía, Turkish Airlines, que comenzó a operar en Venezuela en diciembre de 2016 y que apenas un año después incrementó su número de vuelos de tres a cinco días por semana.
Solo una de estas travesías se hizo a través de otra línea aérea: la panameña Copa Airlines, cuyo nombre aparece en la filtración obtenida por Runrun.es. Según los datos, en este vuelo del martes 20 de marzo de 2018 se transportaron 543 kilogramos de oro.
Aunque Copa negó haber hecho ese recorrido, la explicación de este itinerario puede hallarse por medio del acuerdo de código compartido que Turkish y Copa firmaron en abril de 2017. Ambas compañías, que son miembros de la red global de aerolíneas Star Alliance. Por esta razón, de martes a domingo, existen un par de vuelos de Copa que salen de Maiquetía, hacen transbordo en Panamá y luego continúan a Estambul en un avión de Turkish Airlines. Así fue el vuelo de aquel martes 20.
Fue en marzo de 2018, mes del traslado de Copa, cuando se registró la mayor cantidad de vuelos con el oro vendido: ocho en total.
La mayoría de los traslados de oro, 23 de 28, ocurrieron en la primera mitad del año. Solo hasta mayo ya se habían llevado hasta Estambul 21.3 toneladas, cifra solo un poco mayor a las 20,15 toneladas que Venezuela exportó a Turquía en el mismo período, de acuerdo con datos del Instituto de Estadísticas turco citados por Reuters. Tal cantidad equivalía a US$779 millones. La misma agencia asegura que los envíos alcanzaron el equivalente a US$900 millones en todo el año.
La base de datos Importgenius también registró exportaciones del metal dorado a Turquía que se acercan a lo expuesto en la filtración. Según esta web, durante el primer trimestre de 2018, se despacharon desde Caracas a Estambul 17,2 toneladas de oro (con un precio estimado de US$462,5 millones). Los documentos obtenidos por Runrun.es apuntan que fueron 13,4 toneladas de oro.
El ministro de Desarrollo Minero Ecológico, Víctor Cano, reconoció en julio pasado que el BCV comenzó a exportar oro hacia Turquía para refinarlo, un proceso que hasta ahora no se ha dado. Tampoco hay reportes de que ese oro haya vuelto al país.
Anteriormente, la operación de refinación se cumplía en Suiza, pero luego de las sanciones que Estados Unidos aplicó contra funcionarios venezolanos y aquellos que acordaran mercadear con el oro de la nación, el país europeo se desentendió de tal práctica.
No es la primera vez que Turquía establece relaciones comerciales con países sancionados por el Departamento del Tesoro estadounidense. Un caso es Irán que, de acuerdo con Bloomberg, vende “miles de millones de dólares de combustible” a ese país cada año. El dinero de estas transacciones se destina a cuentas turcas en donde queda “atrapado” por las restricciones internacionales. En el pasado, se aplicaron esquemas que utilizaron el oro en físico para financiar el comercio exterior de la república islámica. De acuerdo con una nota de la BBC, existen sospechas de que el metal precioso venezolano podría estar en territorio iraní.
ALD/Runrunes