El ex presidente de Barcelona, Sandro Rosell, negó los cargos de lavado de dinero en la corte, diciendo que no hizo nada ilegal en relación con la venta de derechos de televisión para partidos que involucran a la selección nacional de Brasil.
El ex ejecutivo de Nike en Brasil, quien presidió Barcelona desde 2010-2014, ha sido acusado de malversación de fondos provenientes de la venta de derechos televisivos y la organización de partidos amistosos con Brasil, así como de un contrato de patrocinio entre Nike y Brasil. También está acusado de formar parte de una organización criminal.
Los fiscales españoles están buscando una sentencia de 11 años en prisión, más una multa de casi 60 millones de euros ($ 68 millones).
«Soy inocente», le dijo Rosell al juez al final de su testimonio. «Siempre defenderé mi prestigio y mi honor».
Los fiscales dicen que Rosell ayudó a lavar cerca de 20 millones de euros ($ 22.7 millones) relacionados con las comisiones para los partidos de Brasil durante el tiempo en que el asediado presidente de la confederación de fútbol brasileña, Ricardo Teixeira, estaba a cargo. Se le acusa de mantener al menos 6,5 millones de euros ($ 7,3 millones) de ese dinero.
